La firma de Sabadell Harquitectes ha sido la encargada de convertir una antigua nave industrial de Esplugues de Llobregat en la sede corporativa de la compañía farmacéutica Galenicum. Con una nueva envolvente que proporciona mayor aislamiento para atemperar los espacios interiores, la intervención aprovecha la capacidad estructural, la generosidad espacial y las buenas condiciones lumínicas existentes.

Climatizados con un suelo radiante-refrescante, los distintos departamentos están organizados en familias, que trabajan en círculo alrededor de jardines interiores, permitiendo relaciones cruzadas. La serie de anillos, que combinan paneles trasparentes y practicables con superficies de madera, evitan interferir con los pilares existentes, situados en los patios o entre claustros, produciendo pasos técnicos que alojan baños y archivos. El espacio no ocupado por los claustros y más cercano a la fachada norte se plantea como un lugar de ocio colectivo, vinculado a la comida y eventos, donde la cocina se configura como el corazón. Por último, el patio central del edificio se completa con un claustro abierto con vegetación, que actúa como gran distribuidor de acceso a todos los anillos de trabajo y al principal lugar de descanso.

Esta obra es una de las finalistas de los Premios Arquitectura del CSCAE