Las llanuras que acompañan al río Aruca en su descenso hacia su desembocadura en Figueira de Foz, limitan a su paso por el municipio de Pombal con un abrupto talud recorrido en su parte superior por la calle de una finca de topografía aterrazada salpicada por árboles aleatorios. La exigencia de los clientes era única y objetiva, también poco flexible, ambos defendían saberes y experiencias diferentes, y todo eso debía de reflejarse en un único proyecto. La receta estaba en cruzar la información conseguida por análisis individual de cada uno y transformarlo en concepto, llevándolo a las últimas consecuencias.

Dada la pronunciada pendiente del solar se opta por dividir el programa en dos plantas. La inferior se sitúa parcialmente enterrada, trazando un muro, que continua al de contención, detrás del que se albergan todos los espacios domésticos y el garaje. Sólo se independiza de este basamento el salón que se materializa en un cubo de vidrio adosado a este perímetro pétreo y un pequeño cuerpo también de piedra, en el que se sitúa una lírica sala para un jacuzzi. El piso superior se diseña como una caja opaca de hormigón oscurecido que alberga los dormitorios. Ésta se apoya sobre el muro de piedra inferior y se proyecta por encima del vítreo cuarto de estar pareciendo en cierto modo ingrávida gracias a la estructura asimétrica que la soporta formada por una gran viga metálica apoyada en uno de sus lados en un pilar y en el otro en tres finos soportes tubulares también metálicos.

Para no debilitar la potencia de los dos volúmenes masivos superpuestos, la introducción de luz y por tanto la apertura de huecos se convierte entonces en una operación compleja. Sobre el volumen de la planta alta, se recortan cuatro porciones estrechas y alargadas que a modo de grietas profundas ayudan a enfatizar la privacidad de las estancias. La iluminación de esta planta se completa mediante

lucernarios abiertos en la cubierta. En el nivel inferior un patio excavado relaciona y baña de luz natural la cocina, el cuarto de estar y el estudio. Este último se comunica con la superficie a través de un angosta escalera de caracol inserida en un pozo. Los materiales que configuran el aspecto exterior, piedra y hormigón, continúan presentes en el interior de la planta baja, enfatizando la idea de un zócalo pétreo habitado. Por el contrario, en el piso superior, los gruesos muros de hormigón se trasdosan con fábrica de ladrillo enlucida de yeso blanco. Los pavimentos con suelo radiante se acaban con madera oscura de jambir al igual que las puertas y las carpinterías de las ventanas... [+]


Cliente Client

Pedro Santos, Rita Cordeiro

Arquitectos Architects

Pedro Santos, Rita Cordeiro/P&R

Consultores Consultants

João Catarino (estructuras structures); Canalfixe (electricidad electricity); Manuel António (carpintería de madera wood work); Carlos Cozinheiro (carpintería metálica metal work); Lusomi (impermeabilización sealing); Joaquim Mendes (cubierta roof); Biseladoram.Pombal (vidrio glass); Paulo José (pintura painting); Móveis80 (mobiliario furniture); Emsd (automatización automation)

Contratista Contractor

Cirun

Fotos Photos

Fernando Guerra/FG+SG