Fundación Beulas en Huesca
Rafael Moneo 

Fundación Beulas en Huesca

Rafael Moneo 


Convencido de que pintar un paisaje es una forma de apropiarse del espacio, José Beulas (1921-2017), genuino representante de la pintura oscense, dedicó la mayor parte de su vida a plasmar sobre un lienzo la sobriedad del campo aragonés. Este paisaje se convierte en el protagonista a la hora de proyectar la fundación que lleva su nombre y que alberga su legado. El edificio se sitúa sobre un campo cultivado surcado por una acequia, en la parcela contigua a la casa y estudio del artista. El deseo de conservar la atmósfera en la que vivió el matrimonio Beulas llevó a mantener antiguos caminos, riegos y construcciones, y a hacer que los nuevos se integraran en el entorno existente.

Del terreno emerge, inspirado en los Mallos de Riglos —y como si de una avanzadilla de los próximos macizos montañosos se tratara—, un volumen ondulado y fluido que nace de un foso-alberca y que, además de resolver la recogida de aguas pluviales, dota a la pieza de cierto carácter insular. El cuerpo sinuoso se acompaña de otra serie de cuerpos que alojan distintos elementos del programa —sala de exposiciones temporales, administración, talleres, almacén, cafetería, tienda, aseos, guardarropa—, los cuales ayudan a configurar un perímetro roto y fragmentado que enfatiza la escala de la pieza principal. El resto del programa se sitúa enterrado. El sótano aloja los archivos, la sala de reuniones y los espacios complementarios para exposiciones, y los servicios se alojan en una cota inferior.

La sala principal, situada a -2.45 metros de la cota de entrada, es un espacio delimitado por líneas cóncavas y convexas que contrastan con la geometría ortogonal de las particiones interiores. Se accede descendiendo por una rampa que se desliza también flanqueada por dos muros ondulantes. Un rasgo característico de la sala lo constituye el techo luminoso que conforma un sistema de cerchas casi autoportantes pues solo cargan la cubierta vidriada, y que funciona como filtro solar. Dos ventanas mantienen el contacto con el exterior: con los campos cultivados a un lado y con las estribaciones montañosas al otro. Las amplias dimensiones y el sistema de iluminación de la estancia aportan una gran flexibilidad de distribución.

La estructura se resuelve con tres muros de gran altura construidos en hormigón con árido grueso, cemento blanco y aditivos minerales, que consiguen unas tonalidades similares a las de las montañas cercanas.

La estructura se resuelve mediante tres muros de hormigón armado con malla electrosoldada y con una composición de árido grueso, cemento blanco y aditivos minerales que permiten obtener un color próximo al de las montañas cercanas. Estos muros soportan una losa maciza de hormigón armado bidireccional de 60 centímetros de espesor, sobre la que se apoyan las cerchas del lucernario.

Los muros soportan una losa maciza de hormigón armado de 60cm de espesor, sobre la que se apoya una estructura de celosías metálicas formando el lucernario que ilumina de manera homogénea el espacio expositivo.


Cliente Client
Fundación Beulas

Arquitecto Architect
Rafael Moneo

Colaboradores Collaborators
Rafael Beneytez Durán (arquitecto responsable project architect); Rafael Moneo, Rafael Beneytez Durán (dirección de obra site supervision); Andrés Bitrián, Vicente Pérez (aparejadores quantity surveyors); Estudio Rafael Moneo (maqueta model)

Consultores Consultants
NB 35, Jesús Jiménez Cañas, Eduardo Gimeno (estructura structural engineer); Rafael Úrculo (instalaciones mechanical engineer)

Contratista Contractor
NECSO

SuperficieFloor area
554m²

Fotos Photos
Duccio Malagamba, Pedro Pegenaute