El edificio se alza sobre tres núcleos estructurales y de comunicación que, a modo de ‘patas tecnológicas’, permiten liberar la planta baja para crear una plaza y ceder un espacio libre al recinto Expo en su nivel de circulación principal. Sobre esta superficie se elevarán cuatro ni-veles —únicamente dos durante el periodo de Expo— y los dos restantes completarán el proyecto en su futuro uso como Departamento del Gobierno de Aragón.

El edificio se desarrolla en una planta cuadrada de 50 metros de lado, con sutiles diferencias en cada nivel, creciendo y decreciendo según el contorno definido por su envolvente. Estos niveles o planos horizontales están atravesados por nueve piezas de caras planas que conforman la estructura del edificio. Tres de ellas, las ‘patas’ constituidas por pantallas de hormigón, llegan hasta cimentación, trasladando los esfuerzos verticales y sir-viendo como contenedores de ascensores y escaleras, mientras que las seis restantes están definidas por un entramado tubular de acero, convirtiéndose en elementos de iluminación y de ventilación de los espacios más interiores del pabellón. Cada patio tiene un desarrollo material y cromático en sus caras, por medio de la combinación de paneles opacos y planos de vidrio. Ambos materiales se tiñen de una misma tonalidad en cada una de las piezas, consiguiendo así reconocerse como un objeto unitario dentro del espacio.

El cerramiento exterior del edificio se plantea como una urdimbre de múltiples planos de líneas quebradas. Dicha envolvente se confecciona con planos de vidrio y con paneles prefabricados de microhormigón blanco reforzado con fibra de vidrio (GRC). Esta piel rugosa presenta mayor opacidad en los niveles de la base para volverse más transparente conforme se asciende hacia al último piso, planteado como una terraza abierta al conjunto de la Expo y a la ciudad.

La estructura de fachada, con sus montantes verticales y chapas horizontales, se configura como un parasol continuo que, con un intervalo medio de 1,35 metros, actúa como protector solar en los meses más desfavorables, cuando la incidencia es más intensa y la inclinación solar mayor; mientras que durante el resto del año permite la entrada agradable de radiación térmica y lumínica, estando esta última regulada por sistemas de oscurecimiento cuando su intensidad es excesiva.

En la planta cuarta, y debido a la inclinación de los paños de fachada, el cerramiento se convierte en un lucernario, que en su lado más expuesto presenta un tratamiento serigrafiado del vidrio para reducir el factor solar y adecuarlo a los valores óptimos de confort... [+]