Museo Davis en Wellesley College
Rafael Moneo 

Museo Davis en Wellesley College

Rafael Moneo 


Tras un largo proceso de selección, el Davis Museum fue el primer encargo del estudio fuera de España, y fue recibido con inmensa alegría ya que, habiendo vuelto Moneo a Madrid tras la experiencia de cinco años como chairman en Harvard, este proyecto le iba a permitir mantener el contacto con un país cuya cultura tanto le atraía e intrigaba. El encargo, por otra parte, cabía entenderlo como ampliación de un edificio que siempre había interesado al arquitecto, el Jewett Arts Center, proyectado por Paul Rudolph.

Se trataba de construir un museo para albergar la colección de una universidad, un college: el museo, por tanto, concebido como depósito de material pedagógico y no sólo como santuario. Pero las colecciones de arte del Wellesley —una de las primeras universidades exclusivamente para mujeres— hay que verlas como muestra de la devoción que tienen por la institución quienes en ella se educaron. Pedagogía y devoción a un tiempo. ¿Era posible reflejar esta duplicidad en una obra de arquitectura?

Siempre estuvo claro que el museo de Wellesley debería poder compararse a un cofre que contuviese todos aquellos tesoros que las antiguas alumnas habían depositado en él. Y que el contenido de aquel cofre debería percibirse de una sola vez.

Exteriormente, el museo se presenta como una masa dominante y opuesta en diagonal a la horizontal biblioteca de Rudolph. Los otros dos elementos del programa —la sala de exposiciones temporales y la pequeña sala de proyecciones— configuran otro volumen menor y contribuyen a cerrar el espacio. La nueva plaza invita a la vida social.

Definida la volumetría capaz de configurar el ámbito urbano, la intervención que vino inmediatamente después fue la de incluir un complejo sistema de circulación vertical en el vacío que definían los planos del sólido. Y así quedó instalada en él una doble escalera que da pie a un movimiento ascensional que desde el arte contemporáneo conduce al primigenio. La verticalidad a la que obligaba el reducido solar se tradujo en compacidad, pero la doble escalera aumentó las distancias entre una sala y la inmediatamente superior, y contribuyó así a establecer el intervalo exigido por la diversidad de las obras de arte expuestas.

La realidad tangible de las escaleras se hizo presente en la delicada textura de los empanelados de madera que la definen y limitan, y que resuena con el exterior mesurado y limpio, donde toman protagonismo los paramentos de ladrillo: alusión a la cultura material del enclave tanto como a la intemporalidad de la historia del arte y la arquitectura...[+]


Cliente Client
Wellesley College

Arquitecto Architect
Rafael Moneo
Payette Associates/Scott Payette Associate Architect (arquitectos asociados associate architects)

Colaboradores Collaborators
Victoria Kiechel (proyecto project)

Consultores Consultants
Le Messurier Consultants (estructura structural engineering); Fisher and Marantz (iluminación lighting); John Altieri Consulting Engineers (instalaciones mechanical engineering); Acentech (acústica acoustics)

Contratista Contractor
Richard White Sons

Superficie construidaBuilt area
5.700m² (total gross); 3.400m² (útil net)

Fotos Photos
Michael Moran, Steve Rosenthal©Historic New England, from the Steve Rosenthal Collection of Commissioned Work at Historic New England