Ampliación de la Academia de Arte Cranbrook, Michigan
Rafael Moneo- Tipología Educación Universidad
- Material Cerámico Ladrillo
- Fecha 1991 - 2002
- Ciudad Bloomfield Hills (Míchigan)
- País Estados Unidos
- Fotógrafo Duccio Malagamba
Tal vez pueda parecer una exageración decir que Cranbrook es la alternativa americana a la Bauhaus. Fundada el año 1904 por el magnate George Booth, propietario del Detroit News, con la intención de que fuese una institución donde la naturaleza formase parte de la educación, Cranbrook fue en primer lugar una escuela primaria y una residencia situadas en una suerte de bosque encantado. Más tarde su promotor extendió el proyecto educativo a las artes en su más amplio sentido —entendiendo que las Bellas Artes también debían incluir las Artes Aplicadas—, y encomendó el proyecto arquitectónico a Eliel Saarinen, quien había hecho de Estados Unidos su segunda patria tras participar en el concurso del rascacielos para el Chicago Tribune. Saarinen comenzó a trabajar para Cranbrook en 1925 y allí plantó sus reales, construyendo su casa y llamando al escultor sueco Carl Miles para que colaborase con él en la creación de un complejo académico en el que prevaleciese la belleza.
Entre 1925 y 1950, Saarinen levantó en Cranbrook diversos talleres, residencias, aularios y, finalmente, un museo y una biblioteca. Los primeros edificios cabría asociarlos más con el movimiento Arts and Crafts que con los intereses de las vanguardias, en tanto que los dos últimos reflejan los vientos clasicistas que soplaban a comienzos de los años cuarenta. Sirviéndose de los profesores que trabajaban con él en Cranbrook, el arquitecto escandinavo introdujo en sus construcciones un sinfín de muebles, textiles, cerámicas y apliques que dan testimonio de lo que se entendía como moderno en la América de aquellos años. El esplendor de Cranbrook llegó sin embargo tras la II Guerra Mundial, cuando en ella se dieron cita figuras como Eero Saarinen, Charles Eames y su esposa Ray o Henry Bertoia, quienes contribuyeron con sus diseños a definir el gusto de los años cincuenta. Tras dispersarse tan notable grupo, la institución continuó manteniendo su reputación como una de las escuelas de arte más importantes del país.
Autonomía visual
Este proyecto forma parte de una iniciativa para completar y mejorar las dotaciones del campus que se remonta diez años atrás, cuando Lilian Bauder, presidenta de la Cranbrook Education Community, encargó la ampliación del Science Institute a Steven Holl; la remodelación de la Escuela Primaria a Peter Rose; y un gimnasio y piscina a Tod Williams y Billie Tsien. En el caso que nos ocupa se trataba de dotar de nuevas instalaciones a los departamentos de cerámica, textil y metalurgia. El mayor interés radicaba en el solar de que se disponía para levantar el nuevo edificio, en estricta contigüidad con el museo de Saarinen, del cual podía entenderse como continuación.
La primera preocupación fue por tanto establecer qué tipo de edificio podría ser capaz de convivir en estrecha vecindad con el rotundo volumen del museo. Abandonando estrategias que hubieran llevado a reforzar la simetría establecida por la hermosa fuente de Carl Miles dedicada al Rapto de Europa, la ampliación mantiene la integridad del monumento y se configura como un episodio autónomo, generando un patio abierto en el que confluyen el aparcamiento existente, la puerta del León, que conduce a la plataforma de entrada común a la biblioteca y al museo, y los accesos a los nuevos departamentos. La intención ha sido integrar la espalda del museo de Saarinen —que incluye como episodio más relevante la puerta del León— en el nuevo edificio, a un tiempo que se mantiene la autonomía en términos visuales desde la fuente. A esta integración colabora el respeto a los ejes establecidos por el master plan de Saarinen, pues el acceso al nuevo edificio se establece sobre el eje que define la fuente, conviertiéndose literalmente en una nueva entrada a la Academia que celebra y disfruta el aura que la fuente crea. Dos observaciones más conviene hacer a propósito de la planta. Una, la importancia que en la misma tiene la pieza de transición que en ambos niveles da lugar a instalar galerías en las que presentar el trabajo de los estudiantes, que se vería así en continuidad con las obras que exhibe el Museo. La otra, que los lugares de trabajo dispuestos para los estudiantes y el estudio de los artistas que residen en Cranbrook temporalmente se sirven de los mismos útiles para el desarrollo de su labor, estimulando así la proximidad entre alumnos y profesores que siempre ha caracterizado a la Academia.
En cuanto a la imagen del edificio se ha procurado mantener por una parte el carácter fabril de los talleres proyectados por Saarinen, y por otra no alterar ni la escala ni los materiales del conjunto de la Academia, prestando especial atención a la jardinería. El proyecto tal vez se complete en un futuro no muy lejano con la necesaria ampliación del Museo...[+]
Obra
Ampliación de la Academia de Artes de Cranbrook, Bloomfield Hills, Michigan, Estados Unidos.
Cliente
Comunidad Educativa de Cranbrook.
Arquitecto
Rafael Moneo.
Colaboradores
Belén Moneo, Jeff Brock, Collette Creppell, María Ibáñez; David W. Osler (arquitecto asociado); Structural Design (estructura); James Partridge (instalaciones).
Contratista
Barton Malow.
Fotos
Duccio Malagamba.