Estudio Rémy Zaugg, Mulhouse
Herzog & de Meuron 

Estudio Rémy Zaugg, Mulhouse

Herzog & de Meuron 


La colaboración con otras disciplinas es una característica distintiva del estudio. Y una de las más antiguas, intensas y frecuentes es la que se ha llevado a cabo con el artista Rémy Zaugg. Iniciada en 1990 con el plan de ordenación de la Universidad de Borgoña en Dijon, la lista de trabajos en común comprende el complejo Antipodes I en el mismo campus, el plan urbanístico de Basilea y la ampliación del museo de Aarau. Además, el estudio del pintor junto a su casa en Mulhouse-Pfastatt supuso otra oportunidad para prolongar este intercambio de ideas, en la que el artista ha asumido su papel de cliente desde una doble perspectiva. Con una obra pictórica que ha ido distanciándose de la representación, Zaugg es también autor de libros que recogen sus reflexiones y experiencias en torno a la percepción y a la definición de los espacios para el arte, de gran influencia en la Suiza alemana.

En un solar profusamente arbolado, el nuevo lugar de trabajo resume de alguna manera los distintos escenarios que han servido de estudio al pintor a lo largo de su carrera y se une como una pieza exenta al conjunto formado por una villa patricia y la vivienda del jardinero. La tapia de clínker que delimita el solar, una fábrica vecina y el gran tilo que domina el espacio libre entre los edificios dieron las claves de una arquitectura que pretende resaltar la presencia de lo existente. El paralelepípedo de hormigón propuesto levanta sus laterales en sendas marquesinas que proporcionan un lugar protegido al aire libre y evitan que este prisma austero se instale en el jardín como un búnker que muestra su voluntad de aislamiento ante el mundo. Lugar de trabajo y de exposición de las obras al mismo tiempo, el estudio consta de dos estancias de la misma altura sin una función asignada a priori que encuentran en la proporción en planta y en la orientación sus rasgos diferenciadores.

Para definir el espacio sosegado que se buscaba se ideó un sistema de iluminación cenital que huye del artificio frecuentemente asociado a los lucernarios de los museos. Cubiertas por piezas translúcidas de catálogo, las aperturas rectangulares en el techo proporcionan una luz continua y uniforme que se filtra mediante láminas adheridas por la cara externa de las claraboyas, evitando las construcciones contra el soleamiento excesivo y sus mecanismos de manipulación. Al exterior, el testero sur del edificio, de nuevo soporte de los depósitos minerales que el agua de lluvia arrastra, se constituye en fondo pictórico del tilo que lo separa de la casa, transformando esta pieza de arquitectura en herramienta para reinventar la propia actividad creativa. [+][+]


Cliente Client
Rémy Zaugg

Arquitectos Architects
Jacques Herzog, Pierre de Meuron, Harry Gugger

Colaboradores Collaborators
Reto Oechslin, Thomas Allemann, Marco Trombetta

Consultores Consultants
Andreas Zachmann (estructura structure

Fotos Photos
Christian Richters, Margherita Spiluttini