A lo largo de los años, la colección de un enamorado de los objetos de diseño de toda clase ha desbordado la capacidad de acumulación de su casa familiar. La gran diversidad de tamaños, temas y materiales, hace inevitable la elaboración de un archivo, de una rigurosa catalogación y la construcción de un nuevo almacén.

El proyecto evoca la silueta de una nave industrial en la que los usuarios se orientan en la penumbra generada por la fachada de policarbonato, complementada por la luz difusa que penetra a través unos generosos lucernarios que dotan al volumen de su perfil característico. El recorrido interior está organizado mediante un conjunto de balcones y pasarelas, mientras que el plano del suelo permanece reservado para los carros y elevadores que colocan las piezas en las estanterías.

El edificio se concibe como un lugar visitable, al que se accede desde una plataforma técnica apta para camiones y se desciende paulatinamente hasta una plataforma de madera que conecta el depósito con la naturaleza y una exposición de piezas de exteriores. El programa presenta dos partes diferenciadas. Por un lado, la destinada a los usuarios que incluye zona de descarga, cuarentena y catalogación; área de archivo y gestión de adquisiciones y préstamos; y espacios de exposición, reuniones y proyecciones. Por otro, el espacio destinado a los objetos que ofrece sistemas de almacenaje en diversos formatos —anaqueles, gavetas, cajas de seguridad, voluminosos o papel—, montacargas, dependencias de servidores, mantenimiento y seguridad. La mayor parte de la colección, así, permanece a la vista o es fácilmente accesible mediante sencillas operaciones de apertura...[+]