La Marine es una antigua zona industrial, limítrofe con el boulevard de Charles de Gaulle, situada en Colombes, una localidad a las afueras de París perteneciente al departamento de los Altos del Sena. Anteriormente ocupada por la marina francesa, esta zona forma parte de una operación para la recuperación del barrio de Petit Colombes/Grève. En su interior el Bloque B, un fragmento de ciudad lindante con el hospital Max Fourestier y la terminal de tranvía, cuenta con dos parcelas contiguas rodeadas por pasajes peatonales que jalonan el futuro ecobarrio. El programa para la construcción de 72 viviendas presentaba una serie de requisitos: la diversidad generacional entre los residentes, un comportamiento energético eficiente del conjunto (una caldera de biomasa suministra energía a los edificios de servicios y a las viviendas) y la participación de los futuros usuarios en el proceso de diseño.

Tanto la implantación como la volumetría propuestas en ambas parcelas se convierten en el nexo de unión entre los bloques residenciales del nuevo desarrollo y las viviendas unifamiliares construidas en diferentes fases a lo largo de los años. Por un lado, las construcciones de la parcela B1 se organizan alrededor de un patio compartido y adoptan una configuración en forma de U. La base cuenta con dos o tres plantas de viviendas y con una planta baja de usos comunitarios. Sobre ese zócalo se levantan dos torres en esquina, de ocho plantas cada una, que dominan las cubiertas de uso común y sirven de punto de referencia dentro del nuevo barrio. Por otro, el bloque situado en la parcela B2, cuya forma triangular está definida por la intersección de dos calles peatonales, responde a un contexto urbano diferente. La fachada continua compuesta de paneles practicables confiere al edificio una condición de unidad. Además, los paneles garantizan la privacidad de los residentes al tiempo que protegen el interior de la radiación solar y ocultan unas generosas terrazas. La compacidad volumétrica de ambos edificios les permite alcanzar un comportamiento térmico adecuado a las exigencias medioambientales.

Se distinguen dos identidades materiales distintas, ya que ambos edificios presentan revestimientos diferentes. El primero, que se levanta en la parcela B1, se reviste de listones verticales alternos de madera. La envolvente del segundo, erigido en el solar B2, está compuesta por unos paneles móviles perforados de cobre prepatinado. La elección del hormigón armado para la estructura, junto con la sencillez formal y el empleo de un solo material de fachada (en cada caso), permite ahorrar costes sin renunciar por ello a la expresivividad.