En un entorno rural del centro de la isla de Mallorca, en el municipio de Lloret de Vistalegre, se encuentra esta vivienda obra de la firma OHLAB, dirigida por Paloma Hernaiz y Jaime Oliver, con oficinas en Palma de Mallorca y Madrid.

La pastilla compacta, alargada y perpendicular a la fuerte pendiente de la parcela, está perforada transversalmente por un gran hueco central donde se sitúa el salón-comedor. Aquí, el chamizo del techo y el hormigón de suelo se prolongan a ambos lados, generando terrazas que se abren al paisaje. La orientación norte-sur de las estancias permite una ventilación cruzada. La pérgola de chamizo, las persianas mallorquinas y la plantación de árboles protegen del sol. Además, se incorpora un sistema de recogida de aguas pluviales.

Inspirada en la arquitectura tradicional mallorquina, la casa utiliza materiales locales como la madera, el enfoscado de mortero de cal rústico, la teja cerámica, la piedra de marés, el cañizo que contribuyen a su integración en el entorno.