Situado en el barrio de la Bonanova, en el suroeste de Palma, este proyecto residencial consta de dos bloques independientes. Las viviendas, resueltas en dúplex, son seis en planta baja y seis áticos. Las fachadas principales presentan persianas plegables con lamas horizontales de madera, cuyo diseño se optimiza mediante estudios solares y se inspira en la tradición vernácula mallorquina. Los paneles se pueden levantar y transformar de persianas a pérgolas en función de las necesidades, creando una envolvente cambiante. La madera utilizada ha sido obtenida mediante una gestión forestal responsable y sostenible. Por otro lado, las fachadas laterales buscan integrarse en su contexto urbano, sólidas y herméticas, garantizando la privacidad.

El proyecto ha sido diseñado para conseguir la máxima eficiencia energética y una demanda de climatización muy baja. Además, el edificio incorpora un sistema de recolección y almacenamiento de aguas pluviales. Los materiales empleados presentan un bajo impacto ambiental en su extracción y producción.