La zona de Shibaura es un denso y cosmopolita entramado urbano de oficinas en el corazón de la bahía de Tokio. Sobre un reducido solar en esquina, este edificio multiusos establece un meeting point donde se entremezcla el carácter de las áreas de negocios con el de un centro cultural, ofreciendo espacios flexibles para el desarrollo paralelo de talleres, actividades artísticas y de ocio. El programa, que ocupa aproximadamente 1.000 metros cuadrados, se desarrolla en vertical sobre siete niveles conectados por perforaciones de líneas orgánicas que generan espacios de múltiples alturas. La planta baja está abierta al público, y desde la primera entreplanta se accede a un patio no aclimatado donde una escalera serpenteante va comunicando los niveles superiores, creando un recorrido visual por las instalaciones.

La estructura está formada por un núcleo de hormigón interior que alberga los ascensores y una red metálica perimetral de cuatro pilares en cada lado. La fachada, un muro cortina de vidrio azulado, crea retranqueos intermitentes en la fachadas, dando lugar a espacios aterrazados que se cierran con una ligera malla deployé. El edificio se concibe como una caja transparente donde la diversidad de actividades interiores puede apreciarse desde el entorno.