Aunque parezca el nombre de un lejano país de un cuento fantástico, Cuca de Llum es la forma de denominar en catalán a los gusanos de luz, comúnmente llamados luciérnagas. Con este sugerente apelativo se bautiza esta vivienda situada a las afueras de Olot, revestida de una tersa piel de vidrio que al caer la noche se convierte en un velo de luz, evocando la imagen de uno de estos coleópteros tumbado en el césped con la cabeza levantada.

El deseo de los clientes de mantener la parcela desocupada, unido al hecho de que el solar se encontraba tres metros por encima de la calzada, sugirió la posibilidad de desarrollar una pieza alargada de dos plantas junto al límite norte del terreno, dejando semienterrado el nivel de acceso, mientras que la planta principal se desarrolla en la cota del jardín. A este volumen se añade en su extremo oeste un pequeño cuerpo que se alza como un periscopio para captar las vistas, configurando así la citada cabeza de luciérnaga.

En planta baja se ubica el garaje y un conjunto de dos dormitorios, con espacios comunes para juegos distribuidos en torno a un patio bañado por la luz del sol, cubierto por un entramado metálico que además de funcionar como suelo del jardín, hace las veces de ventana indiscreta a través de la que se intuyen los movimientos de los espacios privados de la casa. En la cota de la parcela se encuentra el volumen longitudinal de 17.10x5.70 metros en el que se localiza el programa más público de la vivienda: sala de estar, biblioteca, comedor y cocina. Esta pieza se abre al exterior por todos sus lados, siendo su frente sur completamente practicable por medio de una apertura automática que eleva verticalmente los paramentos permitiendo el acceso al jardín. En el extremo oeste, en el espacio de la vivienda que goza de las mejores vistas, se sitúa, por deseo expreso de los propietarios, la cocina, la cual se prolonga al exterior mediante un porche generado por el vuelo de la sala de estudio que se ubica en el piso inmediatamente superior.

Se elige una estructura de muros de hormigón armado para la planta baja mientras que en las dos superiores se utiliza estructura metálica. Para conseguir que la pieza desaparezca camuflada bajo los reflejos del paisaje, las fachadas se cierran en su totalidad con una piel de cristal laminar, trasdosando también con vidrio los paramentos opacos construidos con muros cerámicos. En el interior el suelo radiante se recubre con linóleo gris oscuro sobre el que se sitúan los muebles de madera aglomerada lacados igualmente en color oscuro... [+]