Basilea es para muchos industria farmacéutica y finanzas; para otros, museos y mercado de arte; y para no pocos, la ciudad de Herzog & de Meuron, que son el patrón oro de la arquitectura; y es legítimo preguntarse cuál ha sido el itinerario que les ha llevado a ejercer tal influencia global. Amigos desde la infancia y alumnos ambos de Aldo Rossi en la ETH de Zúrich, nos gusta comenzar su historia en el Carnaval de Basilea de 1978, porque fue entonces cuando protagonizaron con Joseph Beuys una charanga que reivindicaba el arte contemporáneo en las calles de la ciudad, y fue ese mismo año el de la fundación de su estudio en Rheinschanze, donde permanece hoy. Los primeros proyectos serían deudores del racionalismo con cubiertas inclinadas de Rossi y de la exploración material de Beuys, pero esta combinación daría enseguida paso a obras como una casa de piedra en Liguria que reinterpreta la construcción vernácula con geometrías lacónicas de hormigón o unos apartamentos en Basilea que protegían la fachada vítrea con celosías de fundición evocadoras de las rejillas de las aceras: dos realizaciones desafiantemente heterodoxas y exquisitamente detalladas que serían publicadas de inmediato en la prensa profesional, lo mismo que las viviendas levantadas en Basilea con un elegante e insólito uso de la madera...[+]