La coordinación de la estructura y las instalaciones en contenedores de rigurosa modulación y escrupuloso detalle había sido el principal objetivo constructivo de Foster durante los años 60, y este interés en la nave de uso flexible y ejecución rápida se prolongó en los 70 con una fábrica y unas oficinas que llevaban la abstracción de las cajas hasta un extremo casi metafísico. En la planta de extrusión de aluminio para SAPA en Tibshelf, el proceso de producción determinó la forma alargada del contenedor, cuyo volumen exacto, revestido de paneles de acero lacados en blanco, se levanta en el paisaje como un manifiesto minimalista; y en el centro de IBM en Greenford (proyectado y construido en ocho meses) la integración de las oficinas con los almacenes se lograba con un umbrella building cuidadosamente modulado cuyas fachadas de vidrio alcanzan el ‘casi nada’ miesiano a través del juego cambiante de los reflejos. Pero esta búsqueda del silencio, matizada en SAPA por los colores vivos de los componentes y en IBM por los amarillos y verdes de la estructura, el contraste entre el hierro corrugado y el vidrio, y la articulación del puente que une las cajas, comenzó a percibirse como el final de un camino, y en los siguientes proyectos se explorarían sendas más expresionistas...[+]