Sede del Partido Comunista Francés, París
Oscar Niemeyer 

Sede del Partido Comunista Francés, París

Oscar Niemeyer 


Ubicada en la región nordeste de París, la sede del Partido Comunista Francés fue uno de los primeros encargos que Niemeyer recibió en Europa. El proyecto está dividido en tres partes y contrasta con el barrio de típicas manzanas de urbanización haussmaniana tardía. La primera parte es la base, que ocupa la totalidad del terreno de forma irregular, con dos pisos bajo el nivel del suelo (para garajes y otros servicios), además de la planta baja del conjunto —‘el gran salón de la clase obrera’— con espacios de exposición, librería, auditorio para reuniones del partido, etc. El conjunto está rebajado metro y medio respecto a las vías públicas. La planta de estos espacios es de composición libre y sólo es posible percibirlos mediante la vivencia del espacio interior. Su cubierta levemente inclinada ayuda a introducir, mediante el talud que la rodea, una nueva topografía para la plaza.

La segunda parte de la composición es la cúpula del auditorio para las reuniones del Comité Central, situada sobre la plaza interna y cuya forma fácilmente identificable recuerda la sección de la Cámara de los Diputados en Brasilia. Finalmente, la torre de seis pisos, que parece un espejo de curvas sinuosas, da continuidad al tejido urbano vecino, creando un escenario para la cúpula blanca al mismo tiempo que establece los límites del gran vacío urbano que el conjunto señala. «Era el conjunto, o mejor, era la relación entre volúmenes y espacios libres, tantas veces olvidada, lo que yo respetaba», escribió Niemeyer. Con sólo cinco apoyos, la torre sinuosa posee circulaciones verticales en volúmenes anexos, situados en la cara posterior. En el último piso está el restaurante. Si las curvas del volumen de los despachos recuerdan al edificio Copan (São Paulo, 1951), la cúpula del auditorio evoca el Congreso Nacional (Brasilia, 1958) y la estrategia de semienterrar la planta baja estaba también presente en la Catedral (Brasilia, 1958).

Un artificio en el proyecto, que aproxima el suelo como si fuera el fondo infinito de un estudio fotográfico, brinda ligereza a la torre que parece flotar sobre la topografía artificial creada por Niemeyer. El proyecto contó con la colaboración de los franceses Jean de Roche, Paul Chemetov y Jean Prouvé, autor del diseño de los cerramientos y las carpinterías, además del brasileño José Luís Pinho. El edificio fue inaugurado en dos etapas: primero la torre de oficinas (en 1971); después el resto (abierto en 1981). Tras el proyecto, Niemeyer hizo también por encargo de los comunistas franceses el edificio para la Oficina de Empleo en Bobigny y la Casa de la Cultura de Le Havre... [+]