El proyecto se ubica en el Poblenou, dentro del extenso complejo de la antigua fábrica de hilatura de yute conocida como El Cànem. Del edificio existente se conserva la fachada a la calle Doctor Trueta, incluida en el Plan de Protección del Patrimonio Arquitectónico.

El programa se distribuye en tres volúmenes unidos por un gran pasaje ajardinado: dos bloques hacia a la calle y otro de menor altura en el interior de manzana. Un zócalo continuo de ladrillo los unifica a nivel formal y programático. El uso de la cerámica vista, emparentado con las edificaciones industriales históricas del Poblenou, contrasta con las cajas de vidrio que se apoyan en el zócalo y que albergan los principales espacios de trabajo. Las vistas y la incidencia del sol quedan tamizadas por una celosía de aluminio que evoca el entramado del tejido de fibras de yute, a la vez que difumina la presencia urbana del edificio con su geometría abstracta.

En el interior, los bloques a la calle acogen áreas de oficinas diáfanas y flexibles gracias a la ubicación estratégica de los núcleos verticales y a la estructura de grandes luces. En el cuerpo central, en cambio, una sucesión de locales de menor tamaño, en dos alturas, se abren al pasaje central, evocando los antiguos talleres que abundaban en esta parte de la ciudad.

AV Monografías 229: b720 Fermín Vázquez