En la orilla del rio Limmat, en el lugar que ocupaba la antigua sede destruida en un incendio en el año 2012, se levanta esta escuela de danza erigida en el centro simbólico del barrio. El objetivo principal del proyecto consistía en la reactivación el paseo fluvial redefiniendo las condiciones existentes del lugar. Como punto de partida se decidió crear una topografía artificial, dando lugar a un volumen sencillo, compacto, organizado en dos niveles, integrado en la pendiente de la ribera y apenas perceptible desde la cota de la calle. Un nuevo espacio público ocupa la cubierta del complejo y conecta con los caminos existentes que corren paralelos al río en diferentes niveles. En la parte inferior, el volumen se retranquea respecto del límite del solar para así ensanchar el paseo y generar un amplio espacio de entrada. Empleando un único material, el hormigón aislante tipo Liapor, la fachada estructural se resuelve gracias a la repetición sistemática de un único elemento: una abertura triangular que protege al edificio del duro clima suizo al tiempo que lo dota de un ritmo compositivo y de una imagen reconocible. Por último, un sistema de sombreado de plantas de hoja caduca mitiga el exceso de radiación solar durante los meses de verano, mientras que en invierno permite que el sol entre en el edificio...[+][+]