Casa y cobertizo, Breezand
NAT architecten 

Casa y cobertizo, Breezand

NAT architecten 


Los campos del pólder de Breezand se extienden hasta donde la vista alcanza en los alrededores de este pequeño núcleo del norte de Holanda próximo a la costa. Las fincas se suceden salpicadas por granjas tradicionales y enormes cobertizos construidos con poco dinero, conformando un paisaje abierto y armonioso. En un solar triangular bordeando la carretera, utilizado hasta épocas recientes para depositar los desechos del cultivo de flores, se sitúa la nueva casa de ladrillo de una familia.

El encargo comprendía la construcción de la residencia familiar y de un cobertizo que se dedicaría también al cultivo de bulbos. La normativa de protección contra incendios obligaba a interponer una distancia mínima de cinco metros entre ambos volúmenes. Con el deseo de integrar el proyecto en un entorno ya consolidado y de dar a ambas piezas una unidad al menos visual, éstas se diseñaron con la misma inclinación de cubierta, se construyeron con el mismo material, y se dio al invernadero las mismas dimensiones que a la planta elevada de la vivienda. De esta manera, la casa y su anejo se vislumbran en la distancia como partes de un mismo edificio, y su presencia, gracias la plantación de especies que se ha hecho alrededor de la vivienda, en el patio y en la cubierta, se diluye en el paisaje rural.

De acuerdo a una sencilla organización de espacios —diferentes volúmenes ‘cerrados’ se dividen por medio de elementos transparentes— la residencia familiar se desarrolla en forma de U, en torno a un pequeño patio de entrada orientado al norte. Hacia el sur se han situado el estar y un dormitorio en planta baja, mientras la cocina, el baño y un almacén se orientan al oeste. El acceso y el garaje completan la U en el lado este. La planta superior, unida con el cobertizo por una línea virtual que coincide con la de su cubierta, aloja un despacho y una habitación para invitados, a las que se llega por una escalera que parte directamente del vestíbulo de acceso. Los abundantes elementos de vidrio permiten un juego de pasos cruzados y vistas variadas del jardín. La casa se apodera así del conjunto del solar, y la luz natural se cuela en el interior por los cuatro frentes, confiriendo al lugar una intrigante y compleja experiencia espacial.

El empleo de la cubierta de tierra en la mayor parte de la casa no sólo reduce el impacto visual de la edificación, sino que disminuye también las necesidades de climatización, y por lo tanto el consumo de energía. El ladrillo rojo materializa todos los planos verticales, componiendo con el verde de la vegetación, a menudo encendido por la lluvia, un paisaje doméstico que se diluye en el paisaje local... [+]


Cliente Client

De Goede

Arquitectos Architects

NAT Architects

Colaboradores Collaborators

M. van Zijl, F. van Manen 

Consultores Consultants

Ruppert BV (construcción construction

Contratista Contractor

FX Huibers

Fotos Photos

Peter Cuypers