Después de ascender la colina se llegó a la conclusión de que el mejor modo de establecerse allí era tumbándose sobre una alfombra que se pudiese arrugar, fruncir y ondular para estar más cómodos; protegida del sol por una sombrilla que subiera o bajara sensible a las condiciones del cuerpo, cambiando el carácter del espacio que cubre. El terreno, el cuerpo y la construcción se convirtieron entonces en los factores que modelan los espacios.

Se decide inducir el esquema horizontal, ya utilizado en otros proyectos, a través de la inclusión de tres tipos de información. En primer lugar la relación con el terreno que provoca una deformación en niveles escalonados que se adaptan a la topografía; en segundo lugar la ergonomía que participa en la definición de la planta y de sus flujos; y por último la deformación geométrica derivada del cálculo estricto de la estructura que se traslada directamente a la construcción en hormigón armado. Estos tres parámetros configuran respectivamente un perfil, una sección, y espesor de losas, variables.

El sistema espacial, constructivo y estructural se reduce a dos láminas de hormigón que asumen cuantas cuestiones sea posible. Éste se organiza en una disposición estratificada (estructura-aislamiento- instalaciones-acabado) y utiliza hormigones especializados de distintas cualidades que sugieren sistemas constructivos de otra escala como explanadas o carreteras. Se investiga el modelo de superestructura contrapuesto al de la estructura moderna. Las losas varían su canto para asumir los apoyos y se mantienen independientes una de otra, interponiendo en los puntos que se tocan tacos de neopreno. Las cualidades superficiales de ambas son iguales, lo que fomenta cierta simetría horizontal que será continuamente puesta en crisis a través de los cambios de nivel y de las transiciones a uno y otro lado de las capas. Estas variaciones consiguen una visión expresiva y unitaria del objeto en el que los límites entre las distintas latitudes se disuelven gracias a la continuidad en el movimiento.

La conexión de la plataforma inferior con el suelo se realiza a través de ocho ‘bultos’, piezas irregulares de hormigón que alojan parte de los servicios y de las instalaciones. En oposición a la opacidad de esta planta sótano, el nivel principal se cierra con paramentos de vidrio protegidos del sol por un voladizo que varía de profundidad dependiendo de la orientación. También se utilizan mecanismos de control climático en el corazón de la vivienda, donde se emplaza un patio con un árbol de hoja caduca, un arce rojo, que regula la incidencia solar en las estancias circundantes y refresca el ambiente... [+]