Casa Garriga-Poch, Lles de Cerdaña
Frediani [arquitectura] 

Casa Garriga-Poch, Lles de Cerdaña

Frediani [arquitectura] 


La presencia del casco antiguo de Lles de Cerdaña, así como la de los otros tres núcleos urbanos de este municipio del Pirineo catalán, se remonta al siglo X. Tanto su trama ceretana como su arquitectura medieval se protegen hoy en día de cualquier intrusión con una normativa férrea. No obstante, esta casa de fin de semana para una pareja y situada en pleno centro histórico —su perfil encajado en la antigua alineación se puede ver desde la plaza del pueblo—consigue proponer nuevas formas sin dejar de cumplir escrupulosamente cada una de las ordenanzas.

El paso por debajo de un cuerpo en ménsula indica el acceso a la vivienda desde la calle, conduciendo hasta un jardín que mira al valle y disfruta de excepcionales vistas. Los dos volúmenes que conforman la vivienda, separados por el ángulo casi recto del muro medianero, abrazan poligonalmente el jardín para dotarlo de cierta privacidad. En el interior, los espacios se suceden como reverberaciones de la geometría de la montaña: los ángulos no son rectos, los muros tienen espesor, las estancias funcionan como cajones cerrados de una cómoda. En el nivel inferior, tres estares concatenados se orientan hacia el jardín de entrada comunicados visualmente, mientras la cocina, al fondo de la parcela, respira a través de un pequeño patio. Dos escaleras conducen hasta el nivel superior, donde se sitúan las habitaciones en los dos extremos del abanico. Su presencia marca la altura de los estares inferiores, siempre con la intención de que cada cuerpo deforme los espacios contiguos: donde no hay habitación, la planta baja se expande doblando su altura; donde la hay, los estares se comprimen.

La nueva construcción, montada en seco, se levantó sobre las ruinas de un antiguo edificio. Con el fin de dar sentido a la obligación de emplear materiales tradicionales, se decidió que éstos trabajasen según sus posibilidades reales y no como mero maquillaje. Así que la piedra de las ruinas se ha utilizado para confeccionar gruesos muros a la romana. Los perfiles de acero laminado, con función portante, se han traído de antiguos derribos. La madera —en su mayoría pino proveniente de bosques cultivados de Estados Unidos— se ha empleado para dar forma a la fachada sur. Con un sistema de porticones ideado para la ocasión, a base de listones de 22 milímetros sin barnizar, las contraventanas conforman ligeros fragmentos de cerramiento que abren grandes huecos cuando la casa está ocupada, y se cierran por completo, como si nunca hubieran existido, cuando la casa se abandona y los propietarios regresan a su residencia habitual... [+]


Cliente Client

Xavier Garriga, Conxita Poch 

Arquitecto Architect

Arturo Frediani

Colaboradores Collaborators

Mercé Martín, Francesc Oller, Jordi Ramos

Consultores Consultants

Gerardo Rodríguez (estructura structure)

Contratista Contractor

Peipoch

Fotos Photos

Eugeni Pons