Ayuntamiento en una posada del s. XVII, Andújar
Daniel Gómez-Valcárcel 

Ayuntamiento en una posada del s. XVII, Andújar

Daniel Gómez-Valcárcel 


Comenzadas en 1641, las fábricas de este edificio, que pasó de casa de comedias y posada a mediados del siglo XVII a ayuntamiento en el siglo XIX, atestiguan una memoria herida: las patologías manifestadas al poco de su conclusión se vieron agravadas por las consecuencias del terremoto de Lisboa de 1755. Su recuperación y cambio de uso llevó aparejado el cegado de los arcos que dan a la plaza —con la consecuente pérdida de transparencia—, y el aumento de carga debido a esta actuación indujo nuevos asentamientos de la cimentación que provocaron el desplome de este plano de fachada. Tras una primera ampliación en los años cuarenta del siglo XX, a mediados de los ochenta se construyó una nave en su parte trasera para albergar el parque móvil, extendiendo el cuerpo edificado hasta alcanzar la fachada posterior y esbozando así la configuración definitiva del edificio.

Con esos precedentes, la reciente intervención pone fin a una improvisada sucesión de avatares constructivos. La transformación del esquema estructural refleja una organización arquitectónica que parte de la conservación y consolidación de su estructura básica. El proyecto asigna funciones representativas a las partes históricas y usos administrativos al cuerpo de ampliación, enlazando ambos formal y funcionalmente mediante un eje que, convertido en calle interior, atraviesa el edificio de norte a sur. Este eje deriva del de simetría de la fachada principal, de modo que el orden de ésta impregna todo el conglomerado edilicio.

La actuación devuelve la estabilidad estructural al conjunto mediante la inserción de un entramado metálico exento que permite recuperar la diafanidad y permeabilidad de las galerías, estableciendo de nuevo una relación fluida con la ciudad y sus habitantes. La importancia de los artificios estructurales queda patente de nuevo en el patio principal, en torno al cual se organiza la parte noble del programa. Con el objetivo de aumentar su altura sin comprometer la capacidad portante de las columnas, se construye un zuncho de hormigón visto que, reproduciendo la cornisa, se apoya sólo en aquéllas que tienen continuidad en planta baja y del que cuelgan el resto, de modo que no se transmiten cargas puntuales a las claves de los arcos. La recuperación y restitución de los elementos originales, el recurso a materiales y esquemas compositivos (geometría, división tripartita de los frentes...) que pertenecen a la memoria colectiva, así como el empleo de elementos del repertorio clásico ofrecen un contrapunto al lenguaje contemporáneo que domina los interiores y los alzados secundarios.


Cliente Client

Ayuntamiento de Andújar

Arquitecto Architect

Daniel Gómez-Valcárcel

Colaboradores Collaborators

H. Sánchez Berzal, J. C. Ruiz Apraiz, J. C.Yagüe, M. Pérez Romero, F. Sepúlveda Molina

Contratista Contractor

Garasa

Fotos Photos

Duccio Malagamba