Restaurando las obras maestras del Movimiento Moderno
Más allá de la ideología
La arquitectura del Movimiento Moderno nació rodeada de manifiestos y polémicas, y fue acompañada desde el principio por un impresionante cortejo de manuales y monografías. La propia historia ortodoxa y las genealogías de la arquitectura moderna arrancan con fuerza en 1923 con la redacción por Adolf Behne de La construcción funcional moderna, y se transforman en un río caudaloso, colosal, a partir de los años 1950.
Pero la abundancia y variedad de la información no implica necesariamente exactitud ni profundidad. Una de las consecuencias más interesantes de las campañas de restauración de los edificios más significativos del Movimiento Moderno, ahora convertidos en monumentos, ha sido el sorprendente descubrimiento de lo poco que los conocíamos. Los manuales utilizados por generaciones de estudiantes y profesores abundan en imprecisiones o ignoran sencillamente las cuestiones referentes tanto a los sistemas constructivos de los edificios como a sus proyectos originales, su esquema de colores, sus auténticas plantas o el papel real que arquitectos y clientes tuvieron en su configuración...