La arquitecta y artista Maya Lin ha construido paisajes esenciales, y con su escultura geográfica ha representado la belleza y la fragilidad del planeta. Elevada a la notoriedad mediática cuando, todavía estudiante, ganó el concurso del Vietnam Veterans Memorial en Washington, la estadounidense de origen chino ha sabido resistir el torbellino de la celebridad para producir una obra de ejemplar compromiso con la integridad artística, los valores cívicos y la sensibilidad medioambiental. Siempre en la frontera entre diferentes disciplinas, Lin extrae su inspiración de la naturaleza y de la cartografía, pero también de la arquitectura del paisaje, del land art o del minimal para realizar arte público y objetos escultóricos monumentales e íntimos a la vez. Inevitablemente asociada a los memoriales, la artista ha sido sin embargo capaz de evitar el encasillamiento en ese territorio lírico y solemne para trazar una ruta creativa de singular valor pedagógico y excepcional emoción estética, que utiliza herramientas de la ciencia y procedimientos de la escultura con el propósito de incrementar la conciencia colectiva de nuestra responsabilidad respecto al medio natural, soporte de la vida física, pero también de trascendentes experiencias espirituales...