Peter Eisenman y Rafael Moneo en conversación
Deconstruir el lugar
Rafael Moneo: Creo que es la tercera o la cuarta vez que estoy aquí. Es verdaderamente impresionante lo que he visto hoy. En primer lugar quería decir que estos días he estado pensando en la Ciudad de la Cultura, y lo primero que veo con claridad al entrar es que desde el principio, Peter, pensaste en una ciudad y no sólo en una colección de edificios. Esa es la diferencia entre tu propuesta y las demás. No dices nada sobre lo que había detrás de las intenciones del concurso, pero esa idea de que la ‘ciudad’ se encarara con la otra ciudad, Santiago, es lo que me impresiona.
Luis Fernández-Galiano: De hecho, en su día tomaste la ciudad histórica como referencia.
Peter Eisenman: Sí. Pero quiero contestar a Rafa. Había tres cosas que recuerdo en el subconsciente. La primera fue aproximadamente en 1965. Jim Stirling vino a los Estados Unidos y nos dijo entonces que los arquitectos americanos no sabían hacer edificios urbanos de escala media, sólo edificios exentos de pequeña escala. Fue una crítica dura. La segunda cosa era que en mi propia obra nunca había contemplado la posibilidad de construir con criterios urbanos. En tercer lugar, yo era consciente del problema que se achacaba al Centro Getty: que no era más que una colección de edificios, que no creaba nada que se pudiera considerar urbano. Por eso es importante la idea de escala, así como la de relación de contrapunto entre los edificios, que haya ecos entre ellos, como si fueran un sexteto de jazz tocando. Eso fue lo que intenté. Rafa me pregunta si lo podría teorizar. Quizá podría, pero no lo he hecho. Nunca he escrito nada que teorice sobre ello...