Viviendas sociales en Salou

Estudio de Arquitectura Toni Gironès 


Salou se encuentra en la costa al sur de Tarragona. Paralela al litoral y a unos 25 km de distancia emerge la Sierra de Prades. Con ella choca el aire húmedo procedente del mar, que se condensa en forma de lluvia, desciende por las fuertes pendientes de las montañas y riega la fértil llanura. Este ciclo ha caracterizado el paisaje agrario de la zona. La lógica del modelo agrícola y su interacción con los ciclos naturales contrasta con el modelo de crecimiento urbano, para el cual el territorio es tan solo un espacio físico donde implantarse.

Las viviendas disfrutan de dos orientaciones opuestas y plantean una secuencia transversal de espacios —pasarela, vivienda y terraza— que la dotan de versatilidad y adaptación vinculadas al uso y al entorno climático.

El concurso pedía proyectar 80 viviendas de protección oficial en el extremo norte de Salou. Planteado como una nueva trama urbanizada que se impone a los trazados agrícolas preexistentes, el nuevo emplazamiento se origina a partir de grandes parcelas que contienen edificios aislados, dispuestos ortogonalmente. La normativa definía dos bloques iguales en la esquina de una de las manzanas y en contacto con el nuevo parque. Con una planta de 15x52 metros, cada uno disponía de una orientación favorable al asoleo de la zona interior. Con unos antecedentes en los que se cuestiona la porosidad y la interacción con el medio, y en los que se apuesta por un crecimiento rápido, la propuesta planteó la importancia de los espacios intermedios, de las transiciones y los umbrales como enlace para establecer continuidades entre los diversos espacios. En consecuencia, el proyecto propone un tejido con varias escalas de intervención, cuyo programa de vivienda social fomenta la relación de sus usuarios.

El coste de la obra se optimiza planteando un único tipo de vivienda, organizado en dos franjas por su distinta privacidad, y articulado en torno a una pieza central que aloja las zonas húmedas y los pasos de instalaciones.

Diez viviendas se distribuyen en cada una de las cuatro plantas del edificio, de manera que girando tres hacia el testero y manteniendo siete alineadas a la calle se fragmenta el bloque en dos partes, planteando así las esquinas y las relaciones entre los frentes interiores y exteriores del conjunto. Un ligero talud separa las plantas bajas del terreno, permitiendo la entrada de luz y aire al aparcamiento subterráneo. Es en este plano inclinado tapizado con madreselva, donde se planta un pequeño bosque de chopos para que, en verano, proteja del sol de poniente. Al mismo tiempo, los accesos y los espacios comunitarios se proyectan como lugares de relación, zonas intermedias entre las viviendas y el espacio exterior. Así se entiende la pasarela como un elemento de transición, donde una malla de acero corrugado responde con mayor o menor densidad a las necesidades (barandillas, celosías, balcones, riego gota a gota…), pudiendo acoger colonizaciones vegetales para refrescar los espacios que por su orientación serán muy apreciados en las estaciones cálidas.

El edificio hace uso de materiales sencillos, económicos y de bajo mantenimiento, pero de cuidada disposición y ejecución. Asimismo, se trata de materiales que evolucionan reflejando el transcurrir del tiempo. 

BLOQUE 01_ 2º
BLOQUE 02_ 2º
BLOQUE 01_ BAJOS
BLOQUE 02_ BAJOS


Cliente Client

Foment Immobiliari Assequible, Fundació Obra Social “La Caixa”

Arquitecto Architect

Toni Gironès

Colaboradores Collaborators

Brufau i Cusó (aparejadores quantity surveyors)

Consultores Consultants

Orpa: Xavier Saura (estructura structure)

Contratista Contractor

Tarraco Empresa Constructora

Fotos Photos

José Hevia