Aigües de Vilajuïga, Vilajuïga
Twobo arquitectura  Luis Twose 

Aigües de Vilajuïga, Vilajuïga

Twobo arquitectura  Luis Twose 


El municipio de Vilajuïga se encuentra en una situación privilegiada, entre la Serra de Verdera y el Cap de Creus, y está muy bien comunicado con el resto de la comarca. Con una población de poco más de 1.000 habitantes, Vilajuïga cuenta con una magnífica oferta gastronómica y enoturística. A principios del siglo pasado se fundó en el centro urbano una factoría para la explotación de aguas minero medicinales, que ahora se ha renovado.

El complejo Aigües de Vilajuïga no puede entenderse sin la presencia del agua que fluye bajo tierra: un acuífero de agua carbonatada que desde 1904 no ha dejado de manar. Los pozos y las construcciones que puntúan el terreno son el reflejo de este mundo subterráneo. ¿Cómo hacer evidente algo que ocurre bajo tierra?

El encargo preveía la puesta a punto de las instalaciones de la fábrica, los pozos y los almacenes, así como la adición de nuevos usos: aulas de formación, espacios expositivos y oficinas. Una de las primeras decisiones del proyecto es no construir de más en la superficie, con el objetivo de preservar la atmósfera del lugar, valorar lo que el tiempo había ido olvidando y quizás por ello había permanecido: una antigua masía construida en 1800, unas pequeñas cuadras, un edificio modernista… Unos elementos que simplemente se limpian y se ordenan, poniéndolos en valor.

Bajo tierra, sin embargo, la actuación es muy diferente. Se busca la aproximación al agua, la experiencia de entrar en la profundidad del terreno, de descender, de descubrir el agua en su medio natural, de hacer visible lo invisible.

En el centro del jardín, escondida detrás de un muro de cipreses, se ubicaba una gran balsa circular, que se hundía más de seis metros en el terreno. La existencia de esta balsa se convierte en una oportunidad para descender y acercarse al agua. Así, se comienza la excavación alrededor de la balsa hasta dejar visto el muro curvo, haciéndose visible el lado que hasta entonces permanecía oculto en la tierra. Un nuevo paso, a través de este muro, permite acceder al interior de la balsa, donde los reflejos del agua vuelven a inundar el depósito de ladrillo, como en un recuerdo.

El resto de la intervención consiste básicamente en cubrir el jardín de nuevo, y hacer llegar la luz —y las personas— al interior, mediante lucernarios y rampas. La luz cae vertical, mientras que las personas descienden casi en horizontal, tomándose el tiempo necesario para pasar de la luz a la penumbra, del exterior al interior. En la superficie sólo aparece un estanque circular y la rampa que lo bordea.


Cliente Client
Aigües Minerals de Vilajuïga, Grifols  

Arquitectos Architects
Luis Twose + Two-Bo

Colaboradores Collaborators
Anna Sala, Raquel Vicente, Ourania Chamilaki

Consultores Consultants
Bernuz-Fernández (estructuras structures); Jaume Muntada (arquitecto técnico quantity surveyor)

Contratista Contractor
Jaume Pujades, Estructuras Ultra (estructura structure)

Superficie construida Floor area
1.150m²

Fotos Photos
José Hevia