Jardín de infancia en Maihara
Shuhei Endo 

Jardín de infancia en Maihara

Shuhei Endo 


En la realización de este proyecto se partió de dos ideas básicas: una es que los espacios destinados a la infancia no deben estar delimitados por planos sino que, a ser posible, deben enriquecer su imaginación visual; la otra idea es la importancia de seleccionar los mejores materiales para conformar el espacio. Este jardín de infancia cuenta con una cubierta continua a base de formas curvas bajo la cual se desarrollan las aulas, conectadas entre sí por prismas de hormigón de menor tamaño, que albergan las zonas de servicio. El pasillo entre las aulas y el patio funciona como un lugar intermedio, y es de esperar que la ambigüedad de este espacio estimule la imaginación de los niños.

En cuanto a los materiales, se han escogido teniendo en cuenta en primer lugar la seguridad y la salud de los niños que estarán en contacto con ellos. Se ha utilizado madera natural en vez de madera laminada, tanto para las paredes y suelos como para el mobiliario escolar. Para la estructura se eligieron también piezas enterizas de madera natural. Se trata de un sistema a base de vigas con fijaciones metálicas hexagonales como conectores. El uso de sistemas informáticos eliminó muchas complicaciones, manteniendo la versatilidad y expresividad de la estructura.

Las vigas de madera de 2,5 metros de luz configuran triángulos cuya rigidez estructural y ligereza relativa permite componer formas que se asemejan a una cáscara. En el perímetro la cáscara se apoya en el suelo, hasta donde baja mediante piezas triangulares de mayor luz. En el interior, la cubierta se apoya en las cajas de hormigón que albergan los aseos y almacenes entre las aulas. Los montantes verticales de los cerramientos son también de piezas de madera de dimensiones similares a las vigas, creándose en el interior la sensación de que todos los elementos son portantes.

Durante el desarrollo del proyecto se mantuvieron reuniones con el personal de la escuela para conocer cómo usarían el edificio; así, las cuidadoras pueden controlar a los niños aunque el diseño se corresponda con un plan libre. En cuanto a los usuarios infantiles, quedó clara su preferencia por la variedad espacial. Este edificio es un lugar apropiado en el que los niños desarrollen sin restricciones su sensibilidad espacial. La mejor prueba de que el proyecto ha alcanzado su objetivo es ver que los niños corretean alegres bajo la gran estructura de madera y que les gusta también esconderse y utilizar los pequeños espacios creados entre la cubierta y el patio... [+]


Obra

Kindergarten en Maihara, Prefectura de Shiga, Japón.

Arquitecto

Shuhei Endo.

Colaboradores

Aoi Fujioka, Naohiro Kobayashi.

Fotos

Yoshiharu Matsumura.