A lo largo de un profundo y angosto solar ubicado en un tranquilo distrito residencial cerca del centro de Chicago, el proyecto para esta casa unifamiliar desarrolló una estrategia dual: por un lado, producir un espacio residencial confortable e íntimo y, por otro, fomentar la interacción con la naturaleza hacia el interior. Hacia el exterior las fachadas apenas presentan unas pequeñas aberturas, mientras que hacia el interior de la parcela se abren a través de grandes paños de vidrio.

El programa doméstico se organiza en dos volúmenes dispuestos en ambos extremos del solar, conectados por un cuerpo intermedio que alberga una terraza y una rampa. Al sur, los espacios privados destinados a la familia del cliente se acomodan en el volumen de planta cuadrada (12x12 metros) y tres niveles; mientras que las estancias públicas como acceso, cocina, comedor o dormitorios de invitados están contenidas dentro de un cuerpo alargado (12x6 metros) de dos alturas al norte. Entre estas dos alas se coloca una terraza dispuesta en paralelo a un patio rectangular, convertido en un jardín acuático. El espacio contenido bajo la terraza, frente al estanque, alberga la sala de estar transformada en el centro físico y simbólico de la vivienda...  [+]