Culturas plurales

Rehabilitación del Matadero de Madrid

31/10/2011


Arturo Franco, Vestíbulo e Intermediae

Desde 2007, año en que comenzó a generar actividad estable, Matadero Madrid se ha convertido en uno de los focos más activos del mapa cultural de la ciudad, merced a una programación diversa que compagina las dotaciones permanentes con eventos efímeros articulados en la singular arquitectura del enclave.

La construcción de los mataderos y mercados de ganado de Madrid entre 1911 y 1925, según un proyecto del arquitecto municipal Luis Bellido (1869-1955) y el ingeniero Eugenio Rivera, sobre la antigua dehesa de Arganzuela, junto al río Manzanares, constituye hoy un hito en la arquitectura madrileña, caracterizado por su funcionalidad, racionalidad constructiva y la sencillez conceptual.

Rodeado por un perímetro murado de dos kilómetros y medio de longitud, y con una superficie de 165.415 metros cuadrados, el conjunto constaba, hasta su clausura definitiva en 1996, de cuarenta y ocho edificios, destinados a diversos usos, y definidos por el singular estilo neomudéjar de la época.

En 2003 el Ayuntamiento de Madrid decidió la reconversión de este espacio en un gran laboratorio de creación artística contemporánea, que debería surgir de la recuperación y rehabilitación de los edificios existentes, con total respeto a la organización espacial y estructural de las naves, complementadas con una nueva arquitectura reversible y acorde con el carácter industrial del complejo.

Fundado en estos principios, el proceso, que comenzó con la inauguración en 2007 del centro de recursos Intermediae, las Naves del Español y la Central de Diseño, ha continuado con intervenciones modélicas debidas, en general, a jóvenes arquitectos, como el Depósito de Especies, El Taller, las Naves 8 y 9 (actualmente en construcción) y el conjunto formado por las últimas intervenciones, que recogemos en detalle a continuación, que comprende la Cineteca y el Archivo de Creadores, la Red Bull Music Academy, la Nave 16 con El Ranchito, la Casa del Lector y, finalmente, la urbanización y la Central de Instalaciones.


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