Classic Planning versa sobre el arte de construir ciudades, una disciplina que se mantuvo en declive durante décadas pero que desde la eclosión de la llamada ‘Modern Traditional Architecture’ hace más de cuarenta años ha vivido un auténtico renacimiento. Profusamente ilustrado, el exhaustivo estudio de Nir Haim Buras presenta los fundamentos de lo que él denomina ‘planeamiento clásico’ como base epistemológica para las buenas prácticas urbanísticas y propone una serie de enfoques prácticos para abordar los problemas del urbanismo actual.
El autor describe, analiza y cuestiona el trazado de distintas ciudades del mundo y pone de manifiesto tanto sus rasgos comunes como sus diferencias significativas. En este empeño, Buras abarca concienzudamente proyectos y escritos de distintos movimientos —como, por ejemplo, los CIAM, la Tendenza o el New Urbanism—, arquitectos e historiadores —como Lewis Mumford, Jane Jacobs, Kevin Lynch, Aldo Rossi, Colin Rowe o Edmund Bacon— que justificaron o se opusieron a diversas prácticas urbanas. Del mismo modo, confronta las ideas de muchos profesionales y teóricos con posturas diametralmente opuestas sobre la arquitectura y el urbanismo, desde Le Corbusier, figura fundamental del Movimiento Moderno, a Léon Krier, destacado representante de la Modern Traditional Architecture.
Classic Planning se inscribe en la gran tradición de los manuales de diseño urbano —The American Vitruvius de Werner Hegemann y Elbert Peets, Histoire de l’urbanisme de Pierre Lavedan o Atlante di storia dell’urbanistica de Mario Morini— y comparte con sus célebres predecesores cierto esprit de synthèse, una aproximación que busca comprender los distintos elementos del entorno urbano. Con este libro, el autor ofrece una perspectiva enciclopédica tanto en el plano teórico como en su aplicación práctica, ya que incluye abundantes e ilustrativos ejemplos de cómo diseñar y construir ciudades a partir de sus múltiples componentes: barrios, calles, manzanas, plazas…
Oponiéndose a tendencias cada vez más especializadas, Buras evidencia la amplitud de los conocimientos necesarios para solventar las deficiencias de la ciudad contemporánea. Un afán holístico que resultará especialmente revelador para los arquitectos y urbanistas que, por desgracia, adoptan una visión más fragmentaria de la práctica. Esta es, de hecho, la aportación más importante que hace el libro a la disciplina, al estar dirigido tanto a académicos como profesionales.
Con acierto, Buras advierte de los desastrosos efectos de ignorar la escala de la arquitectura en el diseño urbano contemporáneo, donde muchos se conforman con propuestas ajenas a las cualidades estéticas del entorno construido; aspectos que, en última instancia, pueden afectar favorable o negativamente a cualquier calle, plaza o manzana. En ese sentido, este libro será muy instructivo para los que se esfuerzan por mejorar el urbanismo aunque al tiempo relegan la arquitectura a un papel secundario. El autor acierta al aconsejar a los partidarios del New Urbanism que enmienden este error e insiste en la necesaria introducción de criterios estéticos en la arquitectura y el planeamiento.
Hacia el final del libro, el autor afirma que el planeamiento urbano tiene más la condición de ‘legado’ que de ‘solución’, y con ello revela la cautelosa metodología que ha seguido, sin duda nacida de observar cómo ciertas propuestas urbanas, aclamadas precipitadamente como soluciones milagrosas, acabaron fracasando a pesar de sus buenas intenciones. Buras aboga por la noción de legado para recalcar la relación entre la visión a largo plazo del planeamiento y las situaciones cotidianas que intervienen en la creación de ciudades. Su método abarca numerosos principios urbanos confirmados por la experiencia, y traza la historia de su aplicación en diferentes contextos culturales a lo largo de los siglos.
Además de ser de interés para arquitectos profesionales, urbanistas y estudiantes, el libro podría resultar útil para otro grupo: los políticos y funcionarios municipales, cuya visión de sus propias ciudades podría enriquecerse sustancialmente. Esta obra puede funcionar como herramienta de formación para los responsables electos que dan forma a las políticas urbanas en los ayuntamientos y así contribuir a los cambios en el urbanismo. Muchos de estos funcionarios no suelen contar con experiencia técnica y acostumbran a apoyarse en consultores para justificar la toma de decisiones. Desafortunadamente, tampoco todos esos expertos poseen la amplitud de miras necesaria para una buena planificación urbana y este libro puede proporcionar una base sólida para entender las ciudades, sus retos actuales y la forma de convertirlas en lugares mejores.
