¿Es esto la vida real, o tan solo una fantasía? La más grande cuestión metafísica es el íncipit de uno de los himnos más conocidos del rock, y la letra de Bohemian Rhapsody quizá resuene al hojear este volumen: entre las formas oníricas que muestran las fotografías y el pasmoso realismo de las imágenes digitales, saber si uno de los trabajos de Ma Yansong está construido o no resulta casi tan difícil como distinguir realidad y ficción en el sueño de la mariposa.
Como tantos otros, el arquitecto chino se ha prestado ahora a componer una monografía de su trayectoria a las órdenes de Philip Jodidio, por lo que la estructura musical a la que alude el título —la libre unión de secciones con distintos temas y ritmos sin vínculos entre sí— podría parecer el pretexto de este editor estajanovista para organizar rápidamente uno más de sus coffee table books. Sin embargo, MAD Rhapsody refiere la desprejuiciada exploración formal del estudio —«shape matters»— y apela al mismo espíritu imaginativo y operático de la legendaria canción de Freddie Mercury, si bien podría igualmente transmitir la pasión romántica de la Rapsodia húngara de Liszt o el frenesí cosmopolita de la Rhapsody in Blue de Gershwin.
La rapsodia de Ma Yansong es una secuencia de proyectos que olvida el frío orden cronológico para introducir variables emocionales más afines a la visión del pekinés. Ya en sus obras primerizas —las delirantes Absolute Towers y el plástico Museo de Ordos, pronto catapultados al estrellato—, MAD Architects anunciaba una predilección por los edificios «que fluyen con la gente» que le ha llevado a sembrar durante dos décadas un paisaje surrealista de mórbidos espacios. No sorprende que uno sea un encargo del creador de La guerra de las galaxias, pero en este relato no solo emanan aires de ciencia ficción: ante todo, la de Ma Yansong es una música congelada que sabe trasladar el poder de la imaginación con cualquier forma, a cualquier parte. Adonde sople el viento…