El Learning Center (centro de aprendizaje) de la Escuela Politécnica Federal de Lausana es un equipamiento al servicio de toda la universidad que alberga una biblioteca, un centro de idiomas, oficinas, un café, restaurante y un gran espacio multiusos para eventos como conferencias y presentaciones. Su privilegiada localización en el lugar facilita el que los usuarios acudan a encontrarse y reunirse en él. El suelo y la cubierta conforman superficies suavemente onduladas, en las que se abren patios de diferentes formas y tamaños.

El programa se reparte en tres plantas. La situada bajo rasante es un rectángulo de 145 por 195 metros en la que se sitúa el aparcamiento, las zonas técnicas y el depósito de la biblioteca; la estructura es porticada convencional con luces de 9 metros. En la planta de acceso, cubierta por dos cáscaras de doble curvatura, es donde se produce el encuentro del plano horizontal del suelo con la cubierta en la que además se recortan varios patios. En este nivel se encuentran las funciones más ‘públicas’: café, restaurante y una sucursal bancaria, así como varios espacios de trabajo ‘encapsulados’. El nivel superior, con forjado de hormigón y cubierta metálica, ambos ondulados en paralelo, es un paisaje con patios abiertos donde se sitúan las funciones principales: espacio multifuncional en forma de auditorio escalonado, la biblioteca y las áreas abiertas para los encuentros entre usuarios.

La construcción del centro se inició en septiembre de 2007, y en julio de 2008 se hormigonaron las dos cáscaras del forjado de la primera planta, una operación que supuso dos días enteros, con sus noches, para conseguir una superficie única y homogénea. Se consumieron 4.300 metros cúbicos de hormigón, vertidos sobre una tupida armadura de acero que ‘dibujaba’ el comportamiento estrucutral de la losa curva como una conjunción de arcos rebajados de hasta 90 metros de luz, de directrices variables. El pretensado de los arcos se concentra en los bordes horizontales de la losa, donde aumenta su grosor. El encofrado del forjado se compuso como un puzzle tridimensional. Para conformar la superficie continua de la losa cada uno de los 250 paneles de fibras de madera se montó sobre un bastidor que definía exactamente su pendiente; posteriormente los bastidores se situaron sobre un bosque de puntales, resultando una superficie lista para recibir las armaduras y el hormigón.

A diferencia de la planta baja, la estructura de cubierta del nivel superior es metálica, apoyada sobre delgados pilares metálicos siguiendo una trama de 9 por 9 metros, arriostrados horizontalmente mediante tirantes metálicos en aspa. Las vigas de acero se han definido en taller con la curvatura precisa para cada tramo. Sobre ellas apoya un segundo orden de viguetas de madera que completan mediante superficies regladas la geometría de la cubierta... [+]