Este edificio residencial, encargado por el Institut Municipal de l'Habitatge de Barcelona (IMHAB), se integra en el entorno industrial del barrio de Poblenou, en el distrito de San Martín. La construcción combina la cimentación tradicional con un sistema de módulos prefabricados, optimizando los tiempos de ejecución y los costes, mientras se promueve la sostenibilidad. Su estructura clara y modular facilita una distribución flexible y permite adaptaciones a futuros cambios de uso. En un diálogo con la fábrica textil existente en la zona, el edificio emplea un lenguaje arquitectónico de carácter industrial.

Las 45 viviendas de protección oficial, cada una con dos habitaciones, se distribuyen en un edificio de ocho plantas y una superficie total de 4.465 metros cuadrados, que incluye equipamientos en la planta baja. El edificio incorpora pasarelas exteriores que dan acceso a las viviendas, generan una transición gradual entre el espacio público y privado, y fomentan la interacción entre los vecinos a través de la apropiación de estos espacios intermedios. Además, el proyecto contempla espacios comunitarios adicionales en la planta baja y la cubierta, como áreas polivalentes y una amplia terraza con zonas ajardinadas.

La distribución en planta y la racionalidad estructural dictaron el uso de una estructura porticada con pilares de hormigón y forjados con losas aligeradas de hormigón armado. El proyecto se completó en un tiempo récord de trece meses, con los 104 módulos prefabricados transportados y ensamblados en obra en tan solo quince días.