Formado por 28 apartamentos, el complejo está protegido del tráfico de la calle por una hilera de volúmenes existentes, y abierto hacia el oeste a un verde cementerio que ofrece muy buenas vistas, y cuya presencia ha sido fundamental en el diseño del proyecto. La ubicación del conjunto, entre construcciones de fuerte presencia, lleva a la decisión de revestir las fachadas con paneles de fibrocemento lacados en negro, lo que otorga a los edificios una apariencia rústica, como de patio trasero.

Un arco situado entre los edificios existentes en la calle conduce a un patio común, a través del cual se accede a los apartamentos de forma individual, directamente o mediante escaleras exteriores. Las 28 unidades se distribuyen en dos volúmenes de tres alturas. Todas son dúplex: la vivienda superior y la inferior comparten la planta intermedia. Este desplazamiento permite dotar a cada una de un salón con un amplio ventanal hacia el oeste, con vistas al cementerio y a la puesta de sol, y hace posible también que todas las terrazas estén orientadas al sur o suroeste. La organización abierta de la planta posibilita la entrada de luz natural desde los dos lados y enfatiza su forma alargada. El diseño en dos niveles y las amplias ventanas confieren a las estancias principales un aspecto espacioso y luminoso... [+]