Recinto para jirafas y cebras, Zoo de Dresde
Erwin Heinle  Robert Wischer 

Recinto para jirafas y cebras, Zoo de Dresde

Erwin Heinle  Robert Wischer 


El Grosser Garten es un jardín barroco y antiguo sitio de caza en el centro de la ciudad alemana de Dresde. Además de un palacete, en él se encuentran el jardín botánico y el zoológico de la ciudad. Esa situación de contigüidad ofrecía al zoo una ocasión inmejorable para hacer del parque y su majestuoso arbolado un magnífico telón de fondo que ampliase visualmente su extensión. Después de varios años en que no se dieron las condiciones necesarias para la la exhibición de jirafas —animales que han tenido su sitio en el zoo desde 1876 hasta 1984— se convocó un concurso para la construcción de un recinto para albergar jirafas y cebras. Las indicaciones señaladas por los zoólogos para que los nuevos establos ofrecieran las condiciones de confort actualmente exigidas se resumieron en ‘calor y luz, comida y espacio’.

El conjunto se encuentra junto a la entrada al zoo, en relación directa con el parque, con cuyo entorno se funde. El área exterior ocupa unos 3.000 metros cuadrados y se ha diseñado para recrear visualmente las condiciones de la sabana. Allí se sitúa un árbol-comedero, cuyas ramas son reemplazadas a medida que son comidas por las jirafas, pequeños montículos de arena y un estanque de agua potable. Como prolongación de los caminos existentes, una lengua de tierra se introduce en el foso donde los animales permanecen al aire libre, permitiendo la observación cercana de las jirafas y cebras. Los edificios, dos cilindros irregulares revestidos de tablas verticales de color gris ceniciento, evocan con su vibración el efecto del aire caliente africano. Las copas de los árboles del parque enmarcan ambas construcciones, situándolas en un entorno artificialmente natural. La colaboración de los biólogos ha sido imprescindible en la elección de materiales y dimensiones; la distancia entre los listones verticales de abedul, por ejemplo, debió ajustarse para evitar potenciales riesgos, dado que los huesos de las patas de las jirafas son muy frágiles. En el interior, las proporciones aumentan la sensación de verticalidad: un pasillo curvo entre paredes de vidrio (con doble acristalamiento de seguridad resistente a coces) se adentra en el recinto ofreciendo vistas conjuntas de las jirafas y los visitantes. Una escalera asciende hasta la galería-mirador abierta y con luz natural, desde donde los humanos pueden mirar a los ojos a estos esbeltos animales... [+]


Obra

Recinto para las jirafas y las cebras en el Zoo de Dresde (Alemania).

Cliente

Zoo Dresden GmbH.

Arquitectos

Erwin Heinle, Robert Wischer.

Colaboradores

Thomas Heinle (socio responsable del proyecto); Jens Krausse (dirección del proyecto); Steffen Thombansen.

Consultores

Rehwaldt (paisajismo); Döhler (instalaciones y electricidad); HJW (estructura); Ingenieurbüro für Geotechnik (geotecnia); Roland Meyer(mediciones).

Fotos

Roland Halbe.