Concebida para albergar un parque de elefantes en el zoo de Zúrich, esta estructura colosal de madera conforma una cúpula de geometría anisótropa que se mimetiza con su entorno, un bosque recreado en el interior de la dotación con el objeto de conseguir las condiciones de temperatura, humedad y luz idóneas para los elefantes. La mayor singularidad constructiva de la estructura es cómo ha salvado sus 80 metros de diámetro sin el empleo de soporte auxiliar alguno. La cúpula está realizada con 600 piezas de madera conformadas por tres capas distintas, que se diseñaron mediante sistemas computacionales, se fabricaron con máquinas de corte numérico y se montaron in situ en fases sucesivas. Inicialmente, se instaló un andamiaje auxiliar sobre el que se dispusieron una serie de vigas alabeadas, también auxiliares. En un segundo momento, se procedió a montar la primera capa de las piezas y a atornillarlas entre sí. Por último, se superpusieron las dos capas restantes, que dejan entre ellas espacio para 271 claraboyas de cojines de ETFE impermeables a la radiación ultravioleta. El resultado es una estructura de tamaño extraordinario: un área de 6.800 metros cuadrados y una altura de 15, pero con un espesor de apenas 90 centímetros.