Construido en el lado norte de la Piazza de San Marco, una de las plazas más reconocibles del mundo, el edificio de las Procuratie Vecchie de Venecia se desarrolló en la primera mitad del siglo XVI, bajo el programa de renovación urbana del Doge Andrea Gritti, e involucró a tres arquitectos Mauro Codussi, Bartolomeo Bon y Jacopo Sansovino, estableciendo el lenguaje adoptado por los posteriores desarrollos en la plaza.

El encargo de la compañía de seguros Generali, que ocupó este edificio en sus inicios, requería renovar, deshacer y dar sentido a las modificaciones y adaptaciones llevadas a cabo durante siglos; y, por último, enfatizar la conexión del complejo con la ciudad.

El proyecto de David Chipperfield Architects Milan no se define por un único concepto o gesto, sino por una serie de intervenciones que abordan la complejidad del proyecto: la restauración de los dos primeros niveles, la reorganización de las circulaciones mediante nuevas escaleras; y la inclusión en la tercera planta de salas abiertas al público, así como espacios de trabajo y un auditorio. La estructura se restaura recuperando elementos y características originales, mientras que los espacios interiores se reunifican, empleando materiales y métodos artesanos locales para dotar al conjunto de una imagen unitaria.

Tras la rehabilitación, el edificio acoge una nueva sede de The Human Safety Net, una iniciativa de Generali para apoyar a comunidades vulnerables de todo el mundo, y, por primera vez en quinientos años, se abre al público gran parte de las Procuratie Vecchie.