Fábrica de Tabacos y Cinema Victoria en Santa Cruz de Tenerife
fadg estudio- Tipo Rehabilitación Tienda
- Fecha 2024
- Ciudad Santa Cruz de Tenerife
- País España
- Fotografía Flavio Dorta


La rehabilitación de la antigua Fábrica de Tabacos y del Cinema Victoria ha permitido recuperar estos dos inmuebles de gran valor histórico y cultural para la ciudad de Santa Cruz de Tenerife. Tras décadas de abandono, una intervención integral ha devuelto la vida a este conjunto arquitectónico, ahora destinado a usos comerciales, tras el cierre de la fábrica en 1975, y del cine en 1979. Ambos edificios, construidos en 1923 y 1945 respectivamente, carecían hasta ahora de una protección adecuada en materia de patrimonio.
La fábrica contaba únicamente con una catalogación ambiental que afectaba a sus fachadas, mientras que el cine no tenía ningún tipo de protección. Pese a ello, el proyecto ha apostado por una restauración profunda que pone en valor tanto los elementos protegidos como aquellos que no lo estaban.
Las fachadas han sido cuidadosamente restauradas, destacando molduras, capiteles y cornisas mediante un tratamiento cromático diferenciado. También se ha rehabilitado la cerrajería de fundición, las carpinterías de madera y acero laminado, y se han incorporado vidrios térmicos de alta eficiencia. Se recuperaron además letreros históricos, reforzando la identidad visual original del conjunto. En el interior de la fábrica se restauró el atrio central, respetando su configuración original y los detalles art decó. En el antiguo cine, se mantuvo el característico muro curvo de sillería de toba volcánica roja de la sala de proyecciones.
La fábrica de tabacos presenta un sistema estructural compuesto por muros de mampostería de 60 cm de espesor, tanto en el perímetro exterior (fachadas) como en el interior, alrededor del atrio central. Los forjados de hormigón están conformados por losas macizas de 15 cm de espesor, apoyadas sobre vigas de cuelgue con escaso armado. En la planta baja fue necesario demoler los muros de mampostería en torno al atrio, así como el muro perimetral que separaba ambos inmuebles. Para resolver esta intervención, se ejecutaron grandes vigas cargadero de hasta 10,5 metros de luz, compuestas por perfiles dobles HEB-550. Las plantas superiores se conservaron en su estado original.
La superficie total rehabilitada alcanza los 2.325 m², destinados al nuevo uso comercial. Sin embargo, ha sido el edificio el que ha condicionado ese uso, preservando su carácter histórico por encima de algunas comodidades contemporáneas. Un nuevo elemento vertical, una escalera de evacuación con piel semitransparente, se suma discretamente a la fachada, marcando el equilibrio entre lo antiguo y lo moderno.
Esta obra fue ganadora en la categóría Rehabilitación de los Premios de Arquitectura del CSCAE 2025
























