Desde hace unos años, la ciudad danesa de Aalborg está inmersa en una de transición de una economía industrial hacia una basada en el conocimiento y la cultura. Como parte de ese proceso, el proyecto consiste en la transformación de la Spritfabrikken, una antigua fábrica de Aquavit, en un nuevo centro de arte. Respetando el carácter fabril del lugar, la propuesta agrega un cuarto elemento al complejo en el que los edificios existentes están formalmente diferenciados pero interconectados. Para integrarse en este paisaje industrial la ampliación enlaza con la actitud pragmática de la antigua factoría, aspirando al mismo nivel de precisión en su construcción y explorando, desde una visión contemporánea, las características de sus formas puras y monolíticas. La escala compacta del volumen añadido, combinada con la naturaleza austera de sus fachadas cerámicas, le confiere una cualidad abstracta que lo distingue de las edificaciones preexistentes. Las aberturas en la fachada de ladrillo son limitadas pero precisas, buscando transmitir el carácter abierto y público del centro. Los visitantes ingresan al museo a través del edificio histórico adyacente, mientras que un recorrido continuo a través de la secuencia de estancias de la extensión culmina en la gran sala del Kettle Hall...[+]