Casa-puente en Adelaida
Max Pritchard 

Casa-puente en Adelaida

Max Pritchard 


Situada en la región de la Australia Meridional, a menos de una hora en coche de su capital, Adelaida, la pequeña parcela donde se sitúa la casa tiene como principal singularidad la presencia de un pequeño riachuelo que durante el invierno divide la propiedad en dos partes y cuyos quiebros han dado lugar a una pintoresca hondonada flanqueada por vegetación endémica y árboles de gran porte. Respetar este carácter natural del enclave fue el principal requerimiento de los clientes que, por otra parte, necesitaban que el edificio diese cuenta de un programa permanente y mixto de casa-oficina, y que pudiera construirse con un presupuesto reducido, comparable al de otras soluciones de vivienda prefabricada o industrializada que resultan muy asequibles en un país como Australia, donde la construcción ligera tiene una larga tradición.

El respeto al frágil contexto natural fue el requerimiento desencadentante de la propia forma e implantación de la casa: un estrecho paralelepípedo metálico sostenido por una celosía ligera de acero, que se tiende como un puente habitado entre las dos orillas del pequeño riachuelo, abriéndose, gracias a los amplios ventanales situados en sus lados largos, a las vistas sobre la vegetación circundante.

Por otro lado, los requerimientos del bajo coste, fácil mantenimiento y la deseable industrialización, fueron atendidos tanto por la solución constructiva empleada en la casa (apoyada en un entramado metálico ligero prefabricado, que fue instalado por dos operarios y una grúa en tan sólo dos días), como por el uso de materiales sostenibles y sistemas bioclimáticos con que se ha hecho frente al clima de la región, de tipo mediterráneo. Las fachadas más largas de la pieza se orientan así al norte y al sur para dar cuenta de la radiación solar, bien aprovechándola en invierno gracias a la inercia térmica de las placas de hormigón del suelo, bien disipándola en verano mediante celosías y parasoles, cuyas prestaciones se combinan con la ventilación natural inducida por la disposición pasante de la crujía.

Proyecto

Casa-puente en Adelaida, Australia.

Arquitectos

Max Pritchard (proyecto); Andrew Gunner.

Fotos

Sam Noonan.