Los baños árabes de Baza, municipio situado al noreste de la provincia de Granada, constituyen uno de los más valiosos ejemplos de la arquitectura almohade en la península. La restauración y puesta en valor del monumento se ha basado en cuatro aspectos: la escala del objeto, en sí mismo y en relación con la trama y escena urbana; la luz, como clave de la percepción de los espacios interiores; el agua, como elemento caracterizador del propio baño y como material intangible y evocado; y la materialidad de la construcción medieval, caracterizada por el espesor y lo masivo de sus sistemas constructivos y su vocación de perdurabilidad.

Así, se recomponen las proporciones de los cuerpos construidos y se vuelven a configurar las callejuelas circundantes, ya que los baños se encontraban soterrados y descontextualizados. A través de la luz se ha buscado conseguir las cualidades espaciales de las salas en su estado original. El tamaño, forma y posición de las claraboyas del edificio sobrepuesto evitan el soleamiento directo garantizando la entrada de luz a través de las lucernas —claraboyas estrelladas— de las bóvedas de los baños, presentes en todas ellas salvo en dos, que han sido reconstruidas. En relación con el agua, al quedar sin piso la parte central de la sala caliente (horno), se ha repuesto con vidrio que deja visibles los restos de la estructura y al tiempo simula los reflejos de los baños. En cuanto a los materiales, se eligen sólo tres, que acusan el contraste entre lo nuevo y lo viejo: el hormigón —réplica de la materialidad de la construcción medieval—, el acero y el vidrio.

El nuevo edificio se inspira, por tanto, en las cualidades espaciales de un baño árabe, en el que la luz, el agua, la penumbra y el vapor recrean una atmósfera especial. Se ha seguido el criterio del máximo respeto a los elementos originales, dejando algunas huellas del paso del tiempo, como las tinajas de la bodega. La sencilla organización funcional permite recuperar el perdido patio del ‘maslaj’ o sala de descanso. La puerta de acceso, con la entrada en recodo en el mismo lugar que la original, la estructura de cubierta (forjado de serlio), el rótulo y los tiradores son las únicas referencias a la tradición árabe. Sólo se han restituido los elementos estructurales imprescindibles para la estabilidad y comprensión espacial de los ámbitos afectados por las sucesivas reformas. Las bóvedas afectadas por la vivienda que se construyó sobre ellas se rehicieron con las técnicas y materiales originales y los arcos y pasos, de los que quedaban huellas precisas, así como los pavimentos, según las conclusiones de la investigación arqueológica.


Cliente Client

Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía

Arquitectos Architects

Francisco Ibáñez - Ibáñez Arquitectos S.C.

Colaboradores Collaborators

Fernando Tomás (arquitecto técnico quantity surveyor)

Consultores Consultants

Maryelle Bertrand, José Sánchez Viciana (arqueología archaeology)

Contratista Contractor

Freyssinet, S.A.; Ontiveros S.A. (estructuras y cubiertas metálicas structure and metalic roofs)

Fotos Photos

Fernando Alda