¿Por qué un artículo más sobre la Operación Chamartín hoy? Simplemente porque, desde mi sustento disciplinar, mi compromiso con una cultura y una práctica política de izquierdas y mi responsabilidad como ciudadano, opino que la Operación Chamartín, rebautizada y maquillada con el nombre de MNN (Madrid Nuevo Norte), es un grave atentado físico, social y económico —político al fin— sobre la ciudad de hoy y una pesada hipoteca para el futuro de Madrid. Una hipoteca imposible de amortizar y, más aún, de borrar. Una operación cuya única razón de ser y su finalidad última es la extracción de rentas parasitarias de un suelo público, malvendido a un promotor privado ligado al negocio financiero inmobiliario. Un banco privado. Todo ello con la anuencia y el apoyo de los poderes públicos, sin los que el negocio privado no podría llevarse a cabo.
Porque la Operación Chamartín es un ejemplo, claro y descarado de la ofensiva del capitalismo financiero inmobiliario en la batalla por el dominio, el rapto del espacio urbano, de la ciudad y la metrópoli, cómo la geografía en la que con mayor rapidez pueden colmarse sus insaciables ansias de acumulación, basadas en un proceso especulativo ligado al tráfico financiero, que no en la transformación real de la ciudad y el territorio en aras de una mayor eficiencia colectiva. De una mayor igualdad social y justicia espacial...
Nueva Tribuna: Operación Chamartín. Un atentado urbano