Coincidiendo en el IV Congreso de la Fundación Arquitectura y Sociedad ‘Arquitectura: Cambio de Clima’, celebrado en 2016 en Pamplona , Rem Koolhaas y Richard Ingersoll discutían sobre el papel político de la arquitectura.
Richard Ingersoll: Delirious New York sigue siendo una obra maestra, un texto que introdujo en el discurso arquitectónico un nuevo nivel narrativo. Pero esta historia de la «cultura de la congestión» puede atribuirse al laissez-faire del capitalismo, un capitalismo que, por lo menos, durante la primera mitad del siglo XX todavía fomentaba en algunos aspectos la ciudadanía. Pero hoy el sistema del laissez-faire no produce más que grandes símbolos, desigualdad y un planeta bastante deteriorado. A menudo tus ideas nos llevan a la conclusión de que este es el Sistema con el que tenemos que tratar necesariamente y que es imposible abandonar.
Rem Koolhaas: Hay algo realmente esencial en este trabajo de descripción de la realidad —que es lo que siempre he hecho—, pero pienso también que he sido sistemáticamente muy crítico del laissez-faire. Quiero decir que, si lees mis trabajos publicados por Harvard, te das cuenta de que son una advertencia crítica sobre la histeria consumista. Así que hay una gran diferencia entre mi posición política y mi papel como analista de la realidad...
Cosentino: Koolhaas & Ingersoll