Los presuntos vientos de bonanza económica han traído otros capitales a Madrid: los del magnate Wang Jianlin, el hombre más rico de China, y conocido por despreciar a los bancos y acometer sus proyectos con ingentes fajos de cash. Fascinado, al parecer, por España (a la que, contradiciendo a medio mundo, ve como una tierra de oportunidades), Wang Jianlin se ha convertido en un personaje conocido en nuestro país tras el anuncio de la compra del 20 % del Atlético de Madrid, una noticia que ahora se acompaña con otras dos de mayor calado urbano. La primera afecta al Edificio España, la mole erigida por el ímpetu del desarrollismo franquista y que, por carambolas de la crisis, lleva abandonada casi una década. Después de haberlo comprado al Grupo Santander, y encargar un estudio de rehabilitación a Norman Foster, Wang Jianlin ya tiene permiso para acometer el proyecto, al que destinará 100 millones de euros, y del que resultarán 300 viviendas, un hotel y un gran centro comercial: un programa que probablemente contribuirá a revitalizar la zona. La segunda inversión de Wang Jianlin será mucho mayor, 3.000 millones de euros, que se pretenden invertir en la compra de buena parte de los terrenos militares de Campamento, en el barrio de Aluche, al suroeste de la capital, para construir en el nuevo suelo urbano entre 10.000 y 15.000 viviendas y un gran parque acuático que, según advierten las administraciones, «no tendrá nada que ver con Eurovegas». Algunos vecinos, algo inquietos, comienzan a referirse al proyecto como ‘Aluchina’.
