Tras recibir el encargo para la ampliación del campus del Instituto de Arte de Chicago, la oficina barcelonesa Barozzi Veiga acaba de ganar el concurso para la sede de la empresa Dynafit en la localidad alemana de Kiefersfelden. Su propuesta cualifica un no-lugar situado junto a una autopista cerca de Múnich a través de dos piezas macladas y con impronta escultórica.