Atendiendo a la tradición constructiva local, la intervención renueva el consultorio médico de la pequeña localidad oscense de Azanuy, que cuenta con menos de 200 habitantes, situada la comarca de la Litera. El local municipal se encuentra sobre un almacén y garaje que se han de mantener.

Un patio interior articula la parte existente (vestíbulo, la enfermería, la farmacia y el aseo) y la ampliación (consulta), que se extiende sobre el garaje inferior hasta completar la estrecha parcela, en una disposición longitudinal para abrirse a la plaza y al paisaje rural enmarcado por la nueva extensión. Sobre los muros de carga de termoarcilla —de 24 y 29 centímetros de espesor— se apoyan los forjados unidireccionales de hormigón armado con bovedillas cerámicas curvas. Los interiores presentan revestimientos cerámicos vidriados.