Palacio de Justicia, Antequera

Ignacio Laguillo  Harald Schöenegger 


En el extrarradio de la localidad malagueña de Antequera, en un barrio residencial de reciente creación, se sitúa la nueva sede judicial. La imposibilidad de establecer un diálogo con el contexto impulsó el desarrollo de una arquitectura contenida y compacta, que sin renunciar a su gran representatividad resultara oportuna en la escala del lugar de implantación y adecuada a las necesidades funcionales de usuarios y trabajadores, con amables espacios interiores en los que se materializaran conceptos como los de claridad y transparencia.

La ubicación de la nueva sede judicial en un barrio de reciente crecimiento impulsó el diseño de un volumen representativo, ajustado a la escala del lugar y adecuado a las necesidades funcionales del complejo programa.

Se diseña una volumetría expresiva elevando sobre una plataforma un prisma longitudinal del que emerge una torre. La entrada principal se realiza a través de un vestíbulo de doble altura desde donde se percibe la dimensión pública del edificio y en el que solamente pequeños elementos de articulación y control segregan las necesarias circulaciones entre las distintas áreas.

 Se plantea un esquema lineal a lo largo de la fachada principal que intenta solucionar con claridad el problema de la separación de los recorridos. Los usos directamente relacionados con el público se disponen en planta baja y primera. A partir de este nivel se alza la pieza vertical que contiene las estancias propias del juzgado. Bajo rasante se aloja el programa destinado a instalaciones, archivos y detenidos, divididos por un pasillo central de acceso restringido que secciona prácticamente la planta en dos.

En la urbanización del exterior se tuvo en cuenta, por un lado, la llegada al edificio peatonalmente, con afluencias de público muy variables en tiempo y horas, lo que suscitó el retranqueo del edificio y el desarrollo de rampas, una de ellas levemente escalonada para salvar los desniveles del terreno. 

Por otro lado, se consideró la reserva de aparcamientos restringidos en superficie para el personal, para lo cual se introdujo una nueva calle trasera rodada con una batería de plazas directamente comunicadas con el acceso de los trabajadores, incluyendo también una rampa de entrada para los vehículos policiales y judiciales.

Al exterior el edificio se manifiesta como una pieza monolítica, sólida y cerrada, gracias a su envolvente realizada con paneles de hormigón reforzado con fibra de vidrio (GRC). En el interior, grandes paños de cristal remiten a los conceptos de claridad y transparencia.

 

La elección del material y tonalidad de la fachada pretenden transmitir un importante grado de solidez. Para ello se trasdosan las paredes de ladrillo con paneles prefabricados de hormigón reforzados con fibra de vidrio (GRC) con un acabado superficial, teñido en masa, realizado sobre un molde estriado discontinuo en profundidad y separación que permite ocultar las juntas verticales entre paneles, consiguiendo así una cualidad monolítica interrumpida sólo por profundos huecos que penetran en los espacios públicos de relación.


Cliente Client

Consejería de Justicia y Administración Pública de la Junta de Andalucía

Arquitectos Architects

Ignacio Laguillo, Harald Schönegger 

Colaboradores Collaborators

Andrés García, Olaf Schubert; Francisco Jesús Rodríguez (obra construction); Roberto Alés (aparejador quantity surveyor

Consultores Consultants

Edartec (estructuras structures); Insur JG(instalaciones mechanical engineering

Contratista Contractor

San José

Fotos Photos

Duccio Malagamba