La propuesta de la firma suiza Herzog & de Meuron resultó ganadora del concurso para levantar un museo dedicado a la historia y la construcción del Gran Canal de China —declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 2014— en la ciudad de Hangzhou, en la unión entre este canal y el río Hanggang. El proyecto vencedor se impuso a los presentados por David Chipperfield Architects y Zaha Hadid Architects.

Rodeado de agua, el museo con 50.000 metros cuadrados de área expositiva, organizada en dos niveles, se eleva 12 metros generando bajo él un espacio cubierto. Debajo del museo, dentro de una fachada vidriada, se encuentran un gran salón de baile y una sala de banquetes.

La fachada del museo consta de grandes elementos cóncavos de vidrio que semejan el agua ondulante. En la parte este de la parcela se sitúa un complejo, que evoca la forma de una montaña opaca, para albergar un hotel, un centro de conferencias, restaurantes y el vestíbulo del museo. De esta manera, se constituye el ideal clásico chino de paisaje con agua en la parte delantera y la montaña en la parte posterior.