Este conjunto ubicado en una granja ecológica junto al lago Yang Cheng —en Kunshan, no muy lejos de Shanghái—, está formado por cuatro pequeños edificios públicos, de los cuales los más importantes son el llamado Pabellón de la Cosecha y el centro de visitantes.

El Pabellón de la Cosecha —el primero en terminarse— consiste en una granja alargada que se abre al cielo a través de un gran vacío que contrasta con la congestión vertical de la ciudad, y que es una de las características esenciales del enclave. La idea de proyecto fue integrar la arquitectura en el entorno agrícola para crear un espacio nuevo y único, pero en armonía con la naturaleza. El pabellón, así, se presenta como un prisma sencillo, ligero y traslúcido, cerrado en su parte superior por un delgado plano horizontal que resulta paralelo a la línea del horizonte. Este plano, hecho con varillas prefabricadas de aluminio, se dispone en voladizo.

Por su parte, el centro de visitantes consta de un espacio multifuncional, un dormitorio para mascotas y una casa preexistente que se ha reconvertido en oficina. Desde el Pabellón de la Cosecha, el centro de visitantes aparece revestido con dos pantallas translúcidas y horizontales. La primera está hecha de un acero cortén perforado cuya corrugación contribuye a rigidizar el elemento a la par que protege el sistema de soportes de la parte posterior. La segunda pantalla está formada por una celosía de madera en cuya parte posterior se dispone un corredor que conecta las tres partes principales del edificio. Ambas pantallas hacen posible la iluminación y la ventilación naturales, así como las vistas desde el interior y el exterior del edificio.